Las policías científica y política, conjuntamente con el Ministerio Público abrieron una averiguación a tres academias de formación de funcionarios policiales, las cuales, según las autoridades, han funcionado a espaldas del Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia, la única institución que rige todo lo relacionado con los cuerpos de seguridad del país.
De acuerdo con la información aportada por el Consejo General de Policía (CGP), una comisión del Cicpc y la Disip fueron al Batallón de Infantería 311, en Fuerte Tiuna, donde funcionaba una de las academias policiales.
El CGP explicó que la academia no tenía permiso del MIJ y se denominaba Instituto de Policía Bolivariano de Venezuela (Ipbv). Fue instalada por el Colegio de Policía Bolivariano de Venezuela (Cpbv), cuyo presidente, el inspector general de la policía del estado Yaracuy, José Aníbal Spósito, dijo no haber hecho contacto con el MIJ.
La información del CGP indica que Aníbal Spósito dijo que ya habían egresado 10 mil policías de esa institución y que actualmente son funcionarios en diversos cuerpos, incluso en cargos de dirección.
El organismo indicó que el Ipbv posee núcleos en los estados Anzoátegui, Falcón, Portuguesa, Sucre, Yaracuy, Zulia y Aragua y que la academia tiene su sede principal en esta última entidad.
El inspector Spósito fue trasladado al Cicpc de la avenida Urdaneta, donde quedó a la orden de la Fiscalía 22º de Caracas, a cargo de Leonardo Bolívar. Una representación de la Defensoría del Pueblo y de representantes del CGP estuvieron en Fuerte Tiuna y participaron en la detención del resto de la directiva del Cpbv.
Extraoficialmente se supo que la División contra la Delincuencia Organizada del Cicpc investiga a otras dos academias paralelas que funcionan en Caracas.
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