jueves, 17 de febrero de 2011

Puro corazón

Desde un rincón, una voz femenina va cambiando la entonación para dar vida a la Pata Blanca y al Sapo Enamorado.
También se escuchan risas de niños, que emocionados siguen la historia. Pareciera un salón de preescolar en cualquier bonita escuela de la ciudad, pero es parte de los espacios del Centro Lebrún, en el que se refugian unas 70 familias cuyos miembros presentan requerimientos médicos especiales, condiciones que aquí se convierten en un vínculo de amor. Y es que como cuenta Elizabeth Peinado, “debido a las necesidades especiales hemos estado colaborando unos con
otros. No estamos aislados, todos nos integramos, todos colaboramos. Los que no se conocían, se conocen y ya formamos parte de esta gran familia”. Su amor por los niños desborda al comentar
cómo llegó a encargarse del salón de recreación acondicionado por el Idena (Instituto Autónomo Consejo Nacional de Derecho de Niñas, Niños y Adolescentes). Sólo cuando habla de su pequeña Dicselis se descubren los ojos, no tristes sino ansiosos, de una madre que conoce la delicada condición de su hija que, como miles de niños en Venezuela, enfrenta una cardiopatía congénita.

Dicselis nació cuando comenzaban las lluvias, a finales del 2010. A los 15 días presentó una asfixia, le diagnosticaron cardiopatía congénita y fluido sanguíneo en el pulmón. “A raíz de eso no
podía salir, porque a la niña la tenían aislada en una habitación. Allí estuvimos mes y medio”.
Al salir, Elizabeth se topó con una impactante noticia: “Cuando regresé a mi casa, en Casalta, me encontré con una orden de desalojo de los bomberos, porque la vivienda había cedido... tuvimos
que irnos”.
Las medidas de atención inicial llevaron a Elizabeth, su bebé, su esposo y su otra hija, de 6 años, a dos refugios temporales, hasta que los trasladaron a un lugar en el que se pudiera garantizar la salud de la pequeña Dicselis. Es así como llegaron al Centro de Atención Integral Ciudad Lebrún, en Petare, organizado en tiempo récord para brindar atención a familias con historias como las de los Gafaro Peinado.




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