lunes, 28 de octubre de 2013

A derribar los mitos sobre la vasectomía

Que engorda, que adelgaza la voz, que causa impotencia… Estos son algunos de los mitos relacionados con la vasectomía, cirugía que les permite a los hombres “cortar por lo sano” su posibilidad de seguir teniendo hijos.
Eso hace que por cada tres ligaduras de trompa que se practican las mujeres en Colombia para no tener más hijos, se registre una vasectomía. La uróloga Diana Soraya Torres, de Profamilia, habla de las dudas más frecuentes alrededor de este procedimiento para los hombres.
¿En qué consiste la vasectomía?
Consiste en ligar, cortar y resecar los conductos deferentes, que transportan los espermatozoides desde el testículo a la uretra. Es un procedimiento quirúrgico menor, ambulatorio y sin complicaciones.
¿Cuáles son las ventajas?
La cirugía dura 10 minutos y, como la herida es pequeña, la recuperación es rápida; se usa anestesia local y la incapacidad es de cinco días e incluye la abstinencia sexual y la no práctica de actividad física intensa.
¿Qué tan efectiva es?
La efectividad es del 99 por ciento. El 1 por ciento de las fallas pueden deberse a la repermeabilización de los conductos (es decir que por el conducto vuelven a pasar espermatozoides). Para confirmar dicha efectividad es necesario practicarse periódicamente un espermiograma; el conteo de espermatozoides debe ser de cero.
¿Es irreversible?
Toda vasectomía se hace con el ánimo de que sea irreversible, pero si pasado un tiempo el hombre quiere volver a tener hijos, tiene que someterse a una vasovasostomía, que no siempre es exitosa.
¿De qué depende que sea efectiva?
La efectividad depende del tiempo pasado desde la vasectomía. Si han transcurrido menos de ocho años entre la cirugía y la reversión, la efectividad es del 70 al 90 por ciento; después de 10 años, esta baja al 40 por ciento y con más de 20 años es menor al 30 por ciento. No hay garantía de éxito.
¿Desde qué edad se puede practicar una vasectomía?
Un colombiano puede optar por este método de planificación definitiva desde los 18 años. Eso sí, debe estar en condiciones mentales apropiadas para tomar esta decisión… La mayoría de los hombres se la practica entre los 30 y los 45 años.
¿Cuáles son los mayores mitos sobre esta cirugía?
El principal es la disminución de su capacidad sexual, y el otro es que se van a engordar, pues relacionan este procedimiento con la castración de animales; como estos engordan tras ser castrados, los hombres piensan que les va a pasar lo mismo. Vale insistir en este tema: la vasectomía no es castración, solo se liga el conducto que transporta espermatozoides. No se afecta la erección, la eyaculación es igual y la cantidad de líquido que en esta se expulsa sigue siendo igual, pues el volumen que aportan los espermatozoides es mínimo.
¿Es cierto que disminuye la producción de testosterona?
No es cierto. La testosterona, que también se produce en los testículos, pasa por los vasos sanguíneos, no por el conducto deferente, y se distribuye en los tejidos. Tampoco es cierto que se adelgace la voz, como se cree.
Los hombres piensan que solo las mujeres deben operarse…
Eso está cambiando y hoy vemos que muchos hombres que se hacen la vasectomía no actúan presionados por su pareja, sino porque lo desean. Algo interesante es que la mayoría de los que se operan lo hacen por referencias de sus amigos, no por recomendación médica.
¿Quiénes se someten a este procedimiento?
De acuerdo con los registros de Profamilia, la mayoría de los hombres que optan por la vasectomía están casados, son de niveles educativos medios y altos, y sienten que ya cumplieron con su cuota de fertilidad. También llegan casos de jóvenes que se someten a esta cirugía porque no quieren compromisos ni ataduras o consideran que no serían buenos padres.





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