viernes, 2 de octubre de 2020

Conoce los cinco peces más agresivos de la naturaleza (+Fotos)

 

 Sobrevivir en la naturaleza puede llevar a los animales a desplegar una amplia gama de conductas con el fin de conseguir y preservar recursos, así como para evitar ser comidos. Estos comportamientos están muy arraigados en la genética de ciertos animales. Por ello, aquí te mostramos a los peces más agresivos que existen en la naturaleza.

Si eres fan de la acuariofilia, estos datos son de suma importancia a la hora de seleccionar el tipo de especie que quieres introducir en tu acuario. Si en la naturaleza estos peces ya son muy agresivos, dentro de un tanque con un espacio limitado pueden llegar a ser implacables.

A pesar de lo que el cine y la televisión nos han querido mostrar, las pirañas de vientre rojo (Pygocentrus nattereri) no son tan peligrosas para los humanos como para otros peces. A pesar de esto, su conducta alimenticia es única a la vez de voraz.

Según diversos estudios, en el cerebro de las pirañas de vientre rojo se encuentran una serie de neurotransmisores y receptores muy ligados al hambre y al comportamiento agresivo.

Los cíclidos convictos (Amatitlania nigrofasciata) son unos de los peces más agresivos que existen y su nombre les hace justicia. Esta especie de pez es monógama en serie, es decir, durante cada época reproductiva se crea una pareja que se mantendrá unida hasta el quinto día de la eclosión de los huevos.

Resulta impresionante conocer que tanto machos como hembras son realmente agresivos y devorarán cualquier pez con un tamaño inferior al de ellos. Lo mismo harán con sus alevines si no son lo suficientemente rápidos para alejarse.

Aunque puedan parecer muy apacibles, los peces escalares o peces ángel (Pterophyllum scalare) llegan a ser muy agresivos con sus congéneres y otros peces del acuario si no se les da suficiente espacio.

Por otro lado, al igual que les pasa a algunos de los peces más agresivos que existen, todo está mediado por el hambre. Por esta razón, es importante mantener sus barrigas siempre llenas, sin olvidar que el resto de peces también deben comer.

Todos los peces llamados gurami, de la familia Osphronemidae, sea cual sea su especie son animales muy territoriales y a la vez agresivos. Una vez establecido su territorio, los peces guramis atacarán a cualquier individuo que ose introducirse en su espacio.

Son animales que parecen querer siempre establecer una fuerte jerarquía en la que ellos son los más dominantes. Por lo tanto, si introduces cualquier pez que supere en tamaño al gurami, este no dudará en atacar.

Su origen, el pez betta o luchador de siam (Betta splendens) era uno de los peces menos agresivos que existía en la naturaleza. Su forma de defenderse consistía en la imitación de un animal de mayor tamaño gracias a sus espectaculares aletas.

La cría masiva y selección de los peces betta durante siglos han hecho de este animal uno de los peces más agresivos que pueden encontrarse. Tanto es así que es prácticamente imposible que un pez betta conviva con otro pez dentro de un acuario sin que uno de los dos termine muerto.


En conclusión y como habréis podido ver, en la naturaleza cada animal sigue sus propias estrategias para sobrevivir. En muchas ocasiones, la agresividad y la defensa del territorio son dos buenas armas para lograr la supervivencia en un mundo tan hostil.



Síguenos a través de nuestro: Twitter:      @elparroquiano

Unete a nuestro grupo informativo en Whatsapp
Si deseas comunicarte con nosotros ya sea para denunciar y aportar alguna lnformacion, escribanos aca: elparroquiano100@gmail.com

No hay comentarios.:

Publicar un comentario