En la Biblioteca Pública Julián Temístocles Maza
Luego de un año de abierto el Servicio de Información y Referencia para las personas con Discapacidad de la Biblioteca Pública Julián Temístocles Maza, este martes se conmemoró el aniversario de esta sala con una exposición y eventos culturales dirigida a las personas con algunas limitaciones.
Aura Campos, coordinadora regional encargada de la Red de Bibliotecas Públicas en Anzoátegui, adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Cultura destacó que de esta manera se da cumplimiento a la Constitución, "promoviendo la educación y cultura a personas con dificultades motoras, visuales, de escucha y habla”.
La sala para los discapacitados se conforma de contenidos en Braile y una sala de informática conducida por uno de los invidentes, además de libros hablados. El personal que allí labora ayuda a que perosnas con carencias visuales, de habla o escucha, puedan expresarse y acceder a la formación educativa de manera especial para luego desempeñarse dentro de la sociedad.
El evento realizado consistió en la presentación al público de los recursos con los que cuenta la biblioteca para la consulta, además de una exposición realizada por la artista plástica Nailet Barroso bajo una técnica de investigación que denomina el Método Constanz.
La exposición tuvo una propuesta particular, ya que las personas que participaron debieron tapar sus ojos para percibirla, tal como lo haría un invidente, allí un grupo de guías explicaban el uso de las diversas texturas que combinadas con colores, establecen un lenguaje táctil, que bien pudiera ser el que usan las personas con discapacidad visual.
Oportunidades socialistas
“Se les brinda herramientas de trabajo, el uso de Internet, talleres de contabilidad y artesanía, las personas que dictan los talleres son personas con discapacidad que se desempeñan muy bien en sus áreas”, comentó Cecilia Bastardo encargada de la sala.
La funcionaria indicó que hoy cuenta con 30 personas que asisten a la sala de aprendizaje, cuyos usuarios ahora son parte y apoyo del servicio.
Ernesto Cabrera, quien es invidente desde los 9 años, demostró el manejo de los recursos tecnológicos, “el acceso a la información para personas con discapacidad es posible, a través de diversas formas, hablado, con Braile y hasta con el uso de computadoras”.
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