miércoles, 4 de agosto de 2010

Instrumentos musicales llevan la esperanza a niños del barrio


Siguiendo las políticas de inclusión y promoción cultural como instrumento para la transformación social, el Gobierno Bolivariano a través del Ministerio del Poder Popular para la Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias y de su ente ejecutor, Fundayacucho, realizó en el mes de julio un taller de instrumentos musicales en el populoso sector capitalino El Manicomio, en La Pastora.

Flautas, palos de lluvia, panderetas y maracas fueron los instrumentos que las manos de más de 15 niños y niñas construyeron con materiales de reciclaje y biodegradables, durante los cinco días que duró el taller, guiados por tres facilitadores del colectivo Aguacero de Colores.

“La intención es que las personas aprendieran a hacer sus cosas”, afirmó Valerie López, facilitadora, quien además explicó que Aguacero de Colores quiere rescatar la visión de autogestión desde las comunidades “y que es posible hacer nosotros nuestras propias cosas, sean instrumentos, juguetes, ropa u obras de arte”.

López también destacó el acompañamiento de Fundayacucho más allá del apoyo para que este taller se llevara a cabo. “La Fundación nos instó a que nos organizáramos. Hemos tenido que afinar nuestra metodología de trabajo, tanto en proyecto como en la presentación económica que antes nos manejábamos porque siempre trabajamos ad honorem, nunca tuvimos el apoyo de una institución y el aporte de Fundayacucho nos ha ayudado muchísimo”.

Arquímedes Blanco, conocido mejor como “Chocolate”, es otro integrante de Aguacero de Colores y facilitador del taller de instrumentos musicales. Explicó que este taller vino a enriquecer su experiencia y aprendizaje en el trabajo cultural en las comunidades. “Una de las cosas que tratamos de hacer es intercambiar experiencias con los niños, no nos sentimos profesores, sino facilitadores de un proceso que surge a través del intercambio”, subrayó.

Blanco además hizo un llamado a los padres porque la presencia de éstos es fundamental en los talleres y en la continuidad de lo que se hace. “Yo creo que sí podemos enseñar a los niños que ellos pueden lograr no solamente hacer sus instrumentos, sino a reciclar, que tiene que ver con todo el tema ecológico y el trato a la Tierra, y esta labor va a ser un paso fundamental en todo lo que estamos haciendo”.



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