El Gobierno de Panamá insiste en seguir llevando el tema de
Venezuela al debate del Consejo Permanente de la OEA, aunque ya 29
naciones del continente -contra sólo tres- han votado porque el tema no
sea incluido en la agenda de debate diaria del ente.
El embajador venezolano ante la Organización de Estados Americanos
(OEA), Roy Chaderton, afirmó el lunes que el Gobierno de Panamá insiste
en desconocer la voluntad del organismo y la posición de respeto y no
injerencia que tomó frente a la situación en Venezuela.
El diplomático recordó que la administración del presidente Ricardo
Martinelli llegó al extremo de ser cómplice de la ultraderecha
venezolana, ofreciéndole a una diputada de oposición, Mária Corina
Machado, su curul en el Consejo permanente de la OEA y promover
abiertamente la injerencia extranjera en el país suramericano.
Chaderton comentó que Machado llegó al Consejo y, tras saludar a
varios embajadores, se sentó en el espacio de Panamá, “haciendo (este
país) su derecho soberano de sentar en su silla a quien le venga en
gana”.
Ante ello, Chaderton denuncia que Machado aceptó el cargo de
“embajadora alterna de Panamá ante la OEA” para poder hablar en el
Consejo y pedir una intervención extranjera, violando los artículos 191 y
197 de la Carta Magna de su país y perdiendo así su investidura como
diputada ante el Parlamento.
Estos artículos señalan que los diputados o diputadas a la Asamblea
Nacional no podrán aceptar o ejercer cargos públicos sin perder su
investidura, salvo en actividades docentes, académicas, accidentales o
asistenciales. También disponen que, estos funcionarios están obligados a
cumplir sus labores “con dedicación exclusiva”.
Además, Chaderton también recordó que el verdadero embajador
panameño, Arturo Vallarino, “en algún momento prácticamente aseguró que
la señora (Machado) no iba hablar de Venezuela”.
A pesar de ello, relata que Panamá luego pidió la palabra y “como una
jugada de béisbol” Machado comenzó hablar y apenas dijo “Venezuela” fue
declarada una moción de orden ante la irregularidad. “Ese fue el
final”, enfatizó.
IRRESPETO A LA REGIÓN
En ese orden de ideas, el diplomático advirtió que la amenaza de
Panamá a seguir llevando el tema de Venezuela al debate en la Sesión
Permanente, es “un caso grave de irrespeto a la Organización y a los
Estados soberanos”, ya que 29 naciones -contra sólo tres- “han dicho que
el tema no debe incluirse en la agenda del día”.
Por último, el Embajador venezolano lamentó que Panamá tenga un
“gobierno manso y servicial” a los Estados Unidos, y que este último se
“irrita ante los diferentes” a su política colonialista y de dominación
imperial, como es el caso del Gobierno Bolivariano.
Este lunes, el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela ratificó la
medida aplicada por la Asamblea Nacional para despojar de su cargo a la
exdiputada María Corina Machado, tras violar los artículos 191 y 197 de
la Constitución venezolana.
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