lunes, 30 de junio de 2014

Suspendidas las clases de forma indefinida en Monagas por apagón

Gobernadora Yelitze Santaella tomó la decisión mientras dura la contingencia que vive el estado. Monaguenses pasan las de Caín por situación: hasta 3 horas en colas para llenar el tanque de gasolina y sin agua un 60 % de la población.

La gobernadora de Monagas, Yelitze Santaella, informó esta noche que tomó la decisión de suspender las clases desde mañana en estado en todos los niveles (primaria, secundaria y universitaria), mientras dure la contingencia que se vive -desde el miércoles pasado- por la caída de ocho torres en la estación Palital- El Furrial.

Santaella llamó a la población a la calma. Garantizó los servicios públicos fundamentales. Debido a esta situación los residentes del estado realizaron un cacerolazo en protesta. Los sectores que manifestaron, algunos sin luz desde hace 2 días, fueron: Las Cayenas, Las Garzas y Las Carolinas; algunos otros sectores como San Vicente reportaron que tienen más de 24 horas sin energía eléctrica.

Mientras la falla es corregida los monaguenses pasan las de Caín. Duran hasta tres horas de cola en las estaciones de gasolina para llenar sus tanques. La residente Gloria Villarroel dijo que sacar dinero de los cajeros automáticos de los bancos es un suplicio, porque no dispensan el dinero en algunos casos. Hay varios reportes a las entidades bancarias sobre esta situación.

Otra situación grave que se presentó por la falta de luz, fue en el Mercado popular de Los Bloques, en donde fue remata la comida, generando pérdidas millonarias, porque no tenían cavas para resguardar los alimentos. Las primeras horas congelaron con hielo, pero después no pudieron. Para mañana el expendio de productos alimenticios permanecerá cerrado, mientras se solventa el problema de electricidad.

Los pocos establecimientos comerciales que abrieron fueron los que atiende la comunidad china, pero solo vendieron mediodía y aceptaban nada más que dinero en efectivo.

Otro problema que padecen los monaguenses es la falta de agua porque la mayoría de las urbanizaciones tienen pozos que no pueden operar si luz eléctrica.

El alcalde de Maturín, Warner Jiménez, informó que estima que un 60% de la población está sin servicio de agua. Agregó que tiene seis camiones cisternas trabajando las 24 horas para brindar apoyo a las comunidades afectadas, pero reconoce que son insuficientes para atender la emergencia.
 
 
 
 
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