La modelo costarricense Kathia Adriana
Corella Rojas, de 25 años, era la encargada del resguardo y custodia del
dinero narco que utilizaba una agrupación desarticulada por la Policía
de Nicaragua el pasado jueves en Managua, en la llamada Operación
Cacique.
Así lo indica la acusación que contra
Corella y seis reos más presentó ayer la Fiscalía en el Juzgado Noveno
Distrito Penal de Audiencia de la capital, donde la jueza Indina
Gallardo les impuso la prisión preventiva.
El dinero narco que la modelo
costarricense resguardaba en Nicaragua era el que la agrupación enviaba
de Guatemala hacia Costa Rica, refiere la acusación del Ministerio
Público.
La Policía desmanteló a ese grupo el pasado jueves, decomisando US$871,140, además de 285.6 kilos de cocaína.
Corella utilizaba como escondite una
casa ubicada en un condominio en las afueras de Managua, donde residía
con su pareja, el costarricense Walter Pereira Castillo, presunto jefe
de la banda y quien se suicidó el pasado viernes en su presencia, para
no ser capturado por la Policía.
Así operaban
La modelo costarricense enviaba el
dinero de Nicaragua a Costa Rica en vehículos con compartimentos
artesanales, según la acusación de 21 páginas, en la cual dedican dos
páginas para describir la participación de Corella.
La modelo, que dijo ser estudiante de
tercer año de Medicina en Costa Rica, negó los cargos de lavado de
dinero y crimen organizado que le imputó la Fiscalía nicaragüense.
En declaraciones a los periodistas,
Corella rechazó haber resguardado el dinero narco en su casa, como
asegura la Fiscalía en la acusación. Agregó que el dinero que cuidaba
era el que portaba en su cartera.
“Yo no sabía nada, yo estaba tranquilla
en mi casa, esto para mí es una pesadilla”, aseveró la mujer, quien
refirió ser muy conocida en su país, pero sin decir públicamente que es
modelo.
Sin glamour
Corella llegó ayer a los juzgados sin
vestigios de glamour, calzando zapatos deportivos multicolores, una
blusa rosada y un pantalón tipo jean.
En la audiencia se observó a Corella su
cansado rostro en el espejo de una vanidad y luego pedir un peine a su
abogada, Aura Alarcón, para acicalarse.
En otros momentos tomó de la mano a su
compatriota Gustavo Adolfo Artavia Vega, de 30 años, quien también está
entre los imputados.
La defensa de Corella pidió que su
clienta sea examinada por un médico psiquiatra, “porque ella está muy
afectada” luego del suicidio de su pareja, Pereira Castillo, quien se
quitó la vida frente a ella y la niña de ambos, de 5 años.
Completan el listado de acusados: Llendy
Danilo Pérez, guatemalteco; José Castillo Quezada, costarricense; y los
nicaragüenses Carlos Carbonero Medrano, Ninoska Bonilla Gazo y Aryilia
Bonilla Gazo.
El comisionado general Juan Ramón Gámez,
jefe de la Dirección de Auxilio Judicial de la Policía Nacional,
informó el pasado sábado que la Operación Cacique se ejecutó en el
kilómetro 17 de la Carretera Nueva a León, donde detuvieron dos camiones
de carga internacional y una camioneta, cuyo conductor (Pereira
Castillo) se dio a la fuga y terminó suicidándose.
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