Ante
las pruebas presentadas por el Ministerio Público, fue ordenado el pase
a juicio de cinco militares de alto rango pertenecientes a la Aviación
Militar Bolivariana, así como dos efectivos retirados del Ejército y de
la Guardia Nacional Bolivariana, por presuntamente permitir el paso de
vuelos ilícitos al espacio aéreo venezolano para el transporte de
sustancias estupefacientes y psicotrópicas.
Esta situación fue alertada el 18 de mayo de 2015 ante la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM).
Las fiscales 7ª nacional y 30ª del estado Aragua, Marisela De Abreu y
Eylin Ruiz, respectivamente, ratificaron la acusación contra el coronel
de la Aviación Rafael Ponce Delgado (46), por los delitos de tráfico
ilícito agravado de sustancias estupefacientes y psicotrópicas,
asociación para delinquir y conformación de grupos armados.
El citado militar estaba encargado del aérea de Comunicaciones de la
torre de control del aeropuerto Las Flecheras de Apure, pero para ese
momento estaba en comisión de servicio en el Departamento de
Meteorología del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil.
Asimismo, los delitos de tráfico ilícito agravado de sustancias
estupefacientes y psicotrópicas, asociación para delinquir y
conformación de grupos armados, le fueron ratificados al comandante del
grupo de la Policía Aérea de la Base Sucre-Maracay, mayor Fernando
Antonio Silva (40); al capitán Rafael Vargas Arreaga (37) adscrito al
grupo de Apoyo Logístico de la Base Libertador-Maracay; al teniente
Rider José Silva (36); perteneciente a la Dirección de Vigilancia y
Control 2911 del Escuadrón de Vigilancia y Control de la Ciudad de San
Fernando de Apure; además al teniente Juan José Mujica (24), quien
laboraba en esa dependencia.
Esos mismos actos delictivos fueron confirmados para los militares
retirados el mayor Fernando Alonzo Pereira León (68); y su hermano, el
sargento técnico de segunda de la Guardia Nacional Bolivariana, Jonny
Alfredo Pereira León (48).
La audiencia preliminar, se llevó a cabo en el Tribunal 7º de Control del estado Aragua, instancia que admitió las pruebas presentadas por los fiscales del caso y ordenó el pase a juicio de los siete hombres.
La audiencia preliminar, se llevó a cabo en el Tribunal 7º de Control del estado Aragua, instancia que admitió las pruebas presentadas por los fiscales del caso y ordenó el pase a juicio de los siete hombres.
Cinco de ellos se mantienen privados de libertad en el Centro Nacional de Procesados Militares de Ramo Verde,
con sede en Los Teques, estado Miranda, mientras que los hermanos
Pereira están recluidos en el organismo de inteligencia militar ubicado
en Boleíta Norte, municipio Sucre del estado Miranda.
Por este mismo caso fueron condenados a cinco años de prisión los
colombianos Juan José Gil Flores (58), León Darío (59) y su hermano
Cesar Marín Zapata (42), además del venezolano José Omar Umaña (49),
quienes admitieron ante la citada instancia judicial los delitos de
tráfico ilícito de sustancias estupefacientes y psicotrópicas,
asociación para delinquir y conformación de grupos armados.
Ante esta decisión, las representantes del Ministerio Público apelaron
la sentencia y se mantienen a la espera de la decisión por parte de la
Corte de Apelaciones del estado Aragua.
Los colombianos están cumpliendo su pena en el Internado Judicial de
Monagas, conocido como La Pica, por su parte, Umaña está en el Internado Judicial Capital Rodeo II, en Guatire, estado Miranda.
La investigación data del 18 de mayo de 2015 cuando se denunció ante el
DGCIM que un grupo de personas pertenecientes a varios componentes de
la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, se prestaban para permitir las
salidas y las entradas de aeronaves no autorizadas por el Comando
Estratégico Operacional del territorio aéreo venezolano.
Igualmente, en la denuncia se señaló que un militar de alto rango
ofreció una mensualidad sustanciosa en dólares, a cambio de que no se
impidiera o reportara el tráfico de vuelos ilícitos que trasladaban
presuntas cargas de drogas.
En este sentido, el Ministerio Público, en articulación de esfuerzos
con funcionarios de ese organismo de seguridad castrense, coordinó
diversas diligencias de investigación en las cuales se logró determinar
la participación de los militares y civiles en el hecho.
El 25 de mayo de 2015 fueron capturados Fernando y su hermano Rider
Silva, Vargas Arreaga y Pereira, dos días después, Ponce Delgado y
Mujica, todos detenidos, en Caracas, en atención a órdenes de
aprehensión solicitadas por los fiscales del caso y acordadas por el
Tribunal 7º de Aragua.
Posteriormente, el 5 de julio tras un allanamiento efectuado en un
apartamento ubicado en el estado Vargas, fueron aprehendidos, Gil Flores
y los hermanos Marín Zapata, quienes fungían como los contactos para
transportar las sustancias estupefacientes y psicotrópicas.
Poco después, el 21 de agosto, resultaron capturados entre el estado
Apure y Caracas el mayor retirado del Ejército, Pereira León y Umaña,
respectivamente, por su vinculación con estos hechos irregulares.
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