Un olor agradable en nuestra casa nos garantiza sentirnos más a gusto,tener un refugio en que desconectarnos del estrés diario, el trabajo, el tráfico entre otras cosas.
Una buena fragancia puede llevarnos a un momento de nuestra infancia o a la playa donde conocimos a nuestro primer amor, por ejemplo.
Asimismo una buena fragancia puede hacernos sentir ligeros, conectarnos con la naturaleza sin tener necesidad de salir a la calle. Por eso no dejes de usar este ambientador casero para que tu hogar sea el espacio que siempre soñaste.
Es muy sencillo y el resultado es maravilloso. Toma nota de lo que vas a necesitar. Ingredientes
- Un recipiente de aerosol vacío.
- 3 cucharadas del suavizante para ropa que mejor te haga sentir (30 ml).
- 3 tazas de agua caliente (750 ml).
- 1 cucharada de bicarbonato (10 g).
Preparación
- Lo primero que tienes que hacer es abrir el aerosol para verter el suavizante.
- A continuación, añade el agua caliente (recuerda que es fundamental la temperatura).
- Tras ello, solo queda poner el bicarbonato y agitar muy bien. Este último paso es muy importante, ya que es esencial para que la combinación quede homogénea y puedas rociar tu casa para que huela increíble.
- Si te parece demasiado fuerte, puedes variar las cantidades (suprimir o añadir alguna cucharada de suavizante).
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