Familiares aseguraron que fue un sicariato y que hace días, la víctima había borrado sus fotos de todas las redes sociales.
"Te traigo un regalo de Chile" dijo un hombre que irrumpió el domingo las 5:00 pm, en una vivienda situada en el sector Fe y Alegría, Artigas.
Dentro del inmueble, una mujer yacía sentada en el sofá, con sus dos hijas de 8 y 3 años de edad en cada lado.
Sorprendida, la mujer preguntó la procedencia del obsequio, acto seguido, el hombre desenfundó su arma de fuego y le disparó en cuatro ocasiones, dejándola muerta en el sitio, frente a sus niñas, luego huyó con su acompañante, quien manejaba la moto en la que se trasladó hasta el hogar.
La víctima respondía al nombre de Génesis Leandra Troconis Azuaje de 27 años de edad, ama de casa.
Este lunes, en la morgue de Bello Monte, su madre Oneida Azuaje relató a la prensa que, esa tarde se preparaban para hacer las hallacas, indicó que la puerta de la casa estaba abierta porque en el momento calentaban la leña en el patio.
Aunque la hermana de Troconis Azuaje también fue testigo del crimen junto a las dos menores de edad, manifestó no recordar la vestimenta del agresor "porque todo fue muy rápido" , agregó.
Las conchas de bala quedaron en la escena. Dos horas después, una comisión de la policía científica levantó el cadáver y lo trasladó al organismo forense.
Hipótesis de la familia
"No sabes los problemas que yo tengo" fueron las últimas palabras que Troconis Azuaje le dijo a su padre Mauricio Troconis, vía telefónica, un día antes de ser asesinada.
Mauricio refirió que aunque dejó el hogar cuando su hija tenía apenas 14 años de edad, siempre estuvo pendiente en ayudarla y sintió culpa por no atender la situación de su hija, ahora muerta.
"Eso fue un sicariato. Presiento que mi hija tenía miedo, se escondía de alguien. Desde hace días había borrado todas sus fotos de las redes sociales y eso me causó asombro. Sé que mi hija tenía problemas, pero se fue con su secreto", aseveró.
Según la madre, Troconis Azuaje era una mujer que no salía de su casa, para dedicarse a la crianza de sus hijas. "No iba a fiestas ni consumía licor".
Añadió que a los padres de ambas niñas los asesinaron, poco tiempo después de que nacieron , por lo que aseguró que su hija no tenía pareja sentimental actual.
Sin embargo, dijo que Troconis Azuaje viajaba cada tres meses a Trinidad y Tobago "porque tenía previsto montar un negocio propio de venta de ropa y bisutería", sostuvo Oneida Azuaje.
La víctima era la menor de tres hermanos.
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