La Feria Taurina, que durante 62 años consecutivos se realizaba dentro de los eventos de la Feria de Cali, cada 28 de diciembre, no se hará esta vez. La decisión se debe al cumplimiento de las medidas ordenadas por la Presidencia de la República, la Gobernación del Valle del Cauca y la Alcaldía de Cali, para evitar más contagios de coronavirus informa el diario El Tiempo.
Sin embargo la directiva de la Plaza de Toros de Cañaveralejo hizo un contrato de arrendamiento con la firma española Tauroemoción SLU y esperan realizar futuras temporadas taurinas en 2021, 2022 y 2023, contemplando la posibilidad de traer nuevamente la barbarie en diciembre del próximo año.
Un espectáculo en decadencia
Terry Hurtado, cabildante del Concejo de Cali, dijo que las corridas de toros no deben ser un espectáculo en el que la población disfrute con el dolor a un animal, torturándolo hasta su muerte. Destacó el hecho “de no contar con ese espectáculo de toros asesinados y caballos torturados en la Plaza de Canaveralejo”.
“Este es un espectáculo que está en decadencia, viene en declive económico, sumado a ello las medidas adoptadas por el Gobierno distrital de impedir aglomeraciones producto de la pandemia que vivimos lleva suspender las corridas de toros en Cali”,explicó Hurtado Gómez, al tiempo que llamó la atención de la Secretaría de Seguridad y Justicia para suspender cualquier tipo de reunión clandestina o ‘tentaderos’ como se le conoce a corrales improvisados donde se prueba la bravura de becerros.
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