Desde el año 2009, la Interpol estaba tras la pista de Carmen Andrea Gallardo. Esta mujer era la líder de una organización transnacional dedicada al hurto. Además, no solo la solicitaban en Colombia también en la Unión Europea.
Sin embargo, sus días de libertad acabaron en el barrio Rafael Uribe en Bogotá. En ese lugar se encontraba su hija, quien transmitía para TikTok. Mientras tanto, los investigadores la veían sin que ella se lo imaginara.
En un momento de la transmisión, la hija de Carmen Andrea Gallardo dice que se quejaría sobre una situación con su madre. De la forma en que lo expresó, la policía dedujo que la delincuente se encontraba en el mismo lugar que ella.
A los pocos minutos una comisión policial se trasladó hasta la vivienda donde ciertamente encontraron a la antisocial, a quien le dieron captura, de acuerdo al informe de la Interpol al que tuvo acceso el medio BluRadio.
Antes de regresar a Colombia, Gallardo operó en diferentes países como Portugal. Allí visitaba establecimientos como joyerías y se aprendía la ubicación de los objetos de más valor. Posteriormente, acudía al lugar con sus cómplices y realizaban un robo rápido rompiendo los cristales de los establecimientos. Este mismo modus operandi lo utilizó para robar diferentes lugares en España.
La policía estima que en cada robo pudo sacar ganancias superiores a los 200.000 euros. Además, al llegar a Colombia fundó una banda de ladrones de teléfonos en el Transmilenio.
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