Los hechos ocurrieron en Kumamoto, Japón. Este individuo se encontraba en su residencia el pasado 10 de diciembre a las 12 de la noche cuando vio al insecto.
Su primera reacción consistió en buscar un insecticida que tenía en el lugar y rociar a la cucaracha una gran cantidad del mismo. Sin embargo, a los pocos segundos de accionar la botella, hubo una explosión en el apartamento.
De acuerdo al reporte de medios locales, la fuerza de la explosión ocasionó heridas leves en el sujeto. De igual forma, una ventana se rompió por esta causa, reseñó el medio local Mainichi.
Hasta el lugar llegaron funcionarios de la policía de Kumamoto para indagar acerca de lo ocurrido. Los uniformados encontraron marcas de quemaduras en una mesa calefactora.
Para el Centro Nacional de Asuntos del Consumidor de Japón estos accidentes no son nuevos. En los últimos meses han registrado varias explosiones relacionadas con insecticidas. El organismo detalló que esto podría ocurrir cuando accionan estas sustancias cercas de enchufes y otros artefactos eléctricos.
Por esta razón, hicieron un llamado a la precaución a las personas que usen este tipo de insecticidas.
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