Un sargento de logística del Ejército estadounidense abrió fuego este miércoles en la base Fort Stewart, en el estado de Georgia, hiriendo a cinco compañeros, lo que provocó el cierre temporal del destacamento.
El agresor, identificado como Quornelius Radford, de 28 años, fue reducido tras la agresión y entregado a las autoridades. Actualmente se encuentra en prisión preventiva a la espera de ser juzgado, informó a la prensa el general de brigada John Lubas. Por su parte, el presidente Donald Trump prometió que el detenido «será procesado con todo el peso de la ley».
Los investigadores desconocen el motivo del repentino ataque, pero se descubrió que el tirador tuvo un desacuerdo con una de las víctimas el día anterior. Además, se reportó que el sujeto habría utilizado una pistola personal 9mm que ingresó previamente al cuartel.
Radford se unió al Ejército en 2018 como especialista en logística automatizada y no cuenta con experiencia en combate. En mayo había sido arrestado en un control vehicular por conducir bajo influencia del alcohol.
La instalación de Fort Stewart se dedica al entrenamiento y despliegue de unidades tanto activas como de reserva, y es la sede de la 3.ª División de Infantería. Se reporta que más de 10.000 personas, incluyendo soldados, familiares y personal civil, viven en la base.
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