Unos dientes blancos son tu mejor carta de presentación; pero, sin darte cuenta, puedes sabotear el proceso
Relacionada: Cinco pasos para tener los dientes blancos.
Naturalmente los dientes tienden a oscurecerse con la edad y por
los agentes cromogénicos de bebidas como el café y el té que no son
beneficiosos. La tendencia a fumar y tomar gaseosas de color oscuro
contribuyen a que, poco a poco, tus dientes se tornen amarillos, aunque
existen maneras de solucionar este problema.
Una limpieza y blanqueamiento bucal en tu consultorio odontológico de
preferencia suena perfecto; pero también existen maneras naturales en
las que tú misma puedes hacerlo sin poner un pie fuera de casa.
El agua oxigenada puede convertirse en tu aliado por sus propiedades
antisépticas. El blanqueamiento con este producto es reconocido como una
práctica segura por la Asociación Dental Americana y la manera de
hacerlo es muy sencilla.
Primero compra una botella de agua oxigenada de una solución al 3% y
utilizala a modo de enjuague bucal justo antes de cepillar tus dientes.
La idea es que la solución haga espuma porque esto indica que está
funcionando. Con dos cucharadas del producto es suficiente para
enjuagar.
Otra forma de blanqueamiento natural puede obtenerse con el
bicarbonato de sodio que tiene las propiedades para ello, además de
ayudar a quitar el sarro. Lo único que tienes que hacer es colocar en tu
cepillo de dientes crema dental y agregar un poco del bicarbonato.
Cepilla de manera habitual.
Las frutas no solo son tus mejores amigas cuando de tener un cuerpo
saludable se trata, sino también de cuando quieres una buena higiene
bucal. Prepara una pasta de fresas con bicarbonato y úntalo en tus
dientes con un cepillo suave. Déjalo actuar por cinco minutos y luego
enjuaga normalmente.
La parte interna de la cáscara de naranja es perfecta para este
trabajo porque posee vitamina C, fibra, pectina y limoneno, lo que
permite quitar manchas y blanquear tus dientes. Lo único que debes hacer
es lavar y pelar muy bien la naranja y frotar cada diente con la parte
blanca de la cáscara. Deja que pasen 30 minutos y puedes lavar tus
dientes como de costumbre.
Todos estos ingredientes puede que ya los tengas en tu alacena. ¡Anímate y luce una sonrisa perfecta!
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