En la actualidad es muy común conocer casos donde la mujer es la que trabaja y el hombre es quien se encarga del hogar y del cuidado de los niños. Por fortuna, ahora los padres se involucran mas, siendo cariñosos y responsables.
Generalmente la mujer es quien se encarga de mantener la rutina en el hogar, pues solemos ser más metódicas y organizadas. Es por ello, que cuando le corresponde al hombre estar en casa, es necesario elaborar un calendario con las actividades que papá deberá realizar durante la semana.
Sea cual sea el motivo, es importante que la mujer tome un papel determinante en este intercambio de roles, de modo que la repartición de tareas cuando es el hombre quien cuida sea equivalente a la que se hace cuando es la mamá la que los cuida.
El equilibrio es vital en este tipo de modelos familiares, ya que muchos padres se limitan únicamente a cuidar a los niños, y luego la madre, al llegar a casa debe bañarlos, ayudarlos en las tareas, asear la casa, cocinar para el próximo día y no es lo correcto, no tenemos superpoderes.
Muchas mujeres no le ven problema alguno, pues si deben salir a trabajar prefieren que sus hijos sean cuidados por su padre antes que por un extraño. Pero si te molesta, bien sea por el qué dirán, o porque tu sueldo no cubre los gastos, es fundamental que lo converses con tu pareja, y lo motives a encontrar alguna ocupación.
Asimismo, si es por alguna enfermedad, discapacidad o saturación del área laboral donde se desempeña, es importante que se les comunique a los hijos el porqué de la situación. Esto evitara una posible confusión de patrones o que se sienta avergonzado en la escuela porque su padre es quien se queda en casa.
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