La legislación es una versión mejorada de una existente, a la cual se le incluyeron acápites que favorecen el tratamiento a los fármacodependientes, regulan la administración de bienes incautados al narcotráfico y refuerzan las penas contra los promotores.
Antes de refrendarla, durante un consejo de ministros celebrado en el Palacio de Miraflores, Chávez indicó que la procuradora la había promulgado también.
A solicitud del gobernante, el titular de Interior y Justicia, Tareck El Aissami, explicó que la ley contempla mecanismos para la venta de bienes incautados al narcotráfico, para lo cual se creará un fondo.
Prevé además la creación de tribunales especiales para la atención a ese tipo de delitos y un sistema de tratamiento para personas con adicciones, según El Aissami.
Chávez exigió que la normativa vaya acompañada por programas para garantizar su cumplimiento.
Insisto en esto, dijo el mandatario, quien sugirió la creación de un programa de atención a adicciones, con un cronograma definido de acciones para darle solución a uno de los puntos planteados en la legislación.
Para reforzar el combate contra el narcotráfico, la Asamblea Nacional discute también una ley que le permitiría al Estado derribar aeronaves vinculadas a ese delito, cuando no acepten las indicaciones de la Fuerza Aérea Nacional.
Aunque Venezuela no es un país productor, su territorio es utilizado como corredor para sacar la droga procedente de Colombia, que también surte al mercado nacional.
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