El lanzador venezolano Francisco Rodríguez fue acusado
el miércoles por abuso doméstico, luego que la policía afirmara que el
criollo golpeó a su novia tras entrar en una discusión porque ella creyó
que él la engañaba, informó Joe Petrie del Brookfield Patch.
Rodríguez, de 30 años, fue acusado de un delito menor en la Corte de
Circuito del Condado de Waukesha con un cargo de agresión doméstica.
Si es condenado, se enfrentaría a una pena máxima de nueve meses de prisión y 10.000 dólares en multas.
Es la segunda vez desde 2010 que Rodríguez ha sido acusado de un
episodio de violencia doméstica. Ese año fue detenido y acusado de
asalto en tercer grado y acoso en segundo grado, después de golpear a su
antiguo suegro.
Así fueron los hechos:
A las 2:40 am del 18 de septiembre oficiales de policía del del condado
de Waukesha fueron llamados a una casa en Wales, una comunidad a unos 40
kilómetros al oeste de Milwaukee después de que alguien reportó un caso
de abuso doméstico en curso dentro de la casa. Cuando llegaron, se
encontraron con Rodríguez en la puerta. El pelotero parecía sorprendido
de ver a los oficiales que le preguntaron si había algún problema.
Después que los efectivos explicaron por qué estaban allí, Rodríguez los
dejó entrar a la casa y les dijo que su novia estaba arriba. Los
oficiales encontraron en un piso superior a la sirvienta de la casa,
quien dijo que ella no llamó a la policía, pero luego encontraron a una
mujer de 23 años de edad, llorando y escondida dentro de un armario.
Ella dijo a los oficiales que ella y Rodríguez habían estado
discutiendo antes de ir a la cama, y él se molestó y la golpeó en la
cabeza.
Agregó que su nariz comenzó a sangrar después
de ser golpeada por una historia de abuso psicológico. La mujer dijo a
la policía que tomó una sudadera y trató de detener la hemorragia, pero
Rodríguez la agarró por el pelo y tiró de ella. Una vez en el suelo,
dijo que Rodríguez empezó a patear y le lesionó la parte superior del
hombro izquierdo, con moretones en el muslo superior izquierdo y una
lesión en la mano izquierda cerca de la muñeca.
Después de la golpiza, la chica declaró que Rodríguez la arrastró hasta
el coche. Ella le dijo que la llevara al hospital, pero Rodríguez le
gritó que se cambiara la ropa ensangrentada y se negó a llevarla a
ninguna parte hasta que lo hizo. Ella le dijo a Rodríguez que sentía una
gran cantidad de dolor. No podía levantar el brazo muy alto, así que
cortó la manga de su camisa para poder extraerlo.
Después de ponerse una camisa limpia, de acuerdo con la denuncia,
Rodríguez comenzó a conducir alrededor de la víctima, pero ella dijo que
parecía que sólo estaban dando vueltas en círculos en la subdivisión.
Comenzaron a discutir de nuevo en el camión y la víctima, dijo que
Rodríguez la golpeó en la barbilla y luego regresaron a la casa.
Cuando regresaron, la víctima dijo que quería llamar a la
policía para pedir ayuda, pero Rodríguez agarró todo los teléfonos y
comenzó a esconderlos, así que tuvo que ir a la segunda planta de la
residencia para encontrar un teléfono para utilizarlo . La policía
entrevistó a la empleada por el incidente. Esta dijo que tomó una
pastilla para dormir y no vio el incidente, pero ella ha trabajado para
Rodríguez durante seis años y éste tiene un comportamiento normal y
conocido por ella.
Rodríguez dijo a la policía que la víctima había dicho que quería ir a
Pittsburgh con él durante un viaje por carretera del 18 al 20 de
septiembre, pero él le dijo que no. Se dio una ducha y después de salir,
él dijo que ella lo acusó de hacerle trampa a ella (infidelidad).
Rodríguez
dijo a los oficiales que la víctima "lo empujó y lo empujó". Luego dijo
que la víctima tiene hemorragias nasales cuando llora mucho, así que le
dieron una toalla y fue entonces cuando ella dijo que la mano izquierda
resultó herida.
Dijo que ella entonces le pidió que la llevara al hospital y se fueron a
encontrar uno, pero no pudieron encontrar nada que estuviera abierto,
así que volvieron a la casa y dijo que no quería hablar, así subió a la
habitación y no la volví a ver hasta que los agentes llegaron.
Según la denuncia,
a Rodríguez le preguntaron por qué empujó a
la mujer y él dijo a los efectivos "que cuando ella se le acercaba, lo
agarró por el pelo y él solo la estaba haciendo a un lado".
Los oficiales registraron la casa y encontraron una sudadera
ensangrentada y una camisa con capucha llena de sangre en la entrada de
un closet. Al otro lado del armario había una toalla de baño con sangre.
Los efectivos hablaron con la mujer de nuevo el 20 de
septiembre, dos días después de la llamada, y ella tenía una abrazadera
en su muñeca, pero ahora negó tener otras lesiones. Dejó que una oficial
le inspeccionara la espalda, pero se negó a que un efectivo le viera su
muslo.
Entonces la mujer le dijo a la oficial que del altercado todo era su
culpa porque ella comenzó la discusión y empujó Rodriguez primero.
Ella
dijo que se cayó por su cuenta, por lo que volvió a agravarse una
lesión en la muñeca pre-existente. Luego negó que Rodríguez la había
tocado de alguna manera y que tampoco le había hecho daño
De acuerdo con el informe, la mujer dijo que asumía toda la
responsabilidad por "la falta de respeto" a Rodríguez, y dijo que sólo
llamó al 911 para tratar de calmar las cosas y luego le dio una
respuesta vaga cuando se le preguntó acerca de que Rodriguez ocultó los
teléfonos.
Cuando se le preguntó por qué ella llamó al 911 desde
el armario, la mujer dijo que estaba simplemente en esa habitación con
su bebé, pero cuando los agentes llegaron a la casa, el bebé estaba en
una habitación diferente.
La víctima le dijo a los agentes que su relación con Rodríguez ha
terminado y que quiere volver a su país de origen. Ella dijo que depende
económicamente de Rodríguez porque no tiene amigos o familiares en el
país, lamentó llamar al 911 y no quería llevar el asunto más lejos.
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