En el documento se niega que en Globovisión "esté previsto 'despedir' a
una lista de profesionales del canal" y se aclaran las razones de las
salidas del aire de Ismael García y Kiko Bautista.
La noche de este lunes, la nueva junta directiva de la empresa privada
de comunicación Globovisión emitió un comunicado en el que aclara varias
de las informaciones que en torno a las nuevas decisiones han surgido.
En primer lugar, se reitera que el fin del contrato con el diputado
Ismael García por su participación en el programa Aló Venezuela “fue una
resolución amigable y no tiene relación con hechos políticos
recientes”.
“El canal sigue abierto a la libre expresión del diputado García. La gerencia de información goza de autonomía para cubrir y transmitir sus actividades, y los programas de opinión para invitarlo”, agrega el documento.
En segundo término, se explica que la salida del productor nacional independiente Francisco “Kico” Bautista fue “consecuencia de una preocupación expresada públicamente (por este) con relación al supuesto despido del diputado Ismael García, sin previamente haber buscado y solicitado la información sobre los hechos, como es el deber de todo periodista”.
“Adicionalmente, el señor Bautista se negó a recibir las llamadas telefónicas que se le hicieron para conversar sobre el asunto, y solo apareció el domingo en la noche, cuando ya estaba tomada la decisión por la junta directiva”, manifiesta el referido escrito.
Añade: “Ningún productor nacional independiente tiene derecho a ser consultado sobre las decisiones administrativas' tomadas por la directiva. Esta decisión no afectaba necesariamente la continuación del programa Buenas Noches, ni la relación laboral con los periodistas Carla Angola y Pedro Luis Flores”.
También expresa que la junta directiva “no ha vetado a funcionario o dirigente político alguno en la pantalla de Globovisión. Por el contrario, la política editorial del canal consiste en ampliar su línea de información y de opinión a todas las voces del país, sin discriminación alguna”, en clara alusión a la supuesta censura que se habría impuesto sobre el opositor Henrique Capriles Radonski.
“La cobertura de un determinado dirigente o partido político no puede estar determinada por lo que decida un grupo privado de interés. Ningún medio de comunicación social está obligado a transmitir en vivo, ni más o menos tiempo, las declaraciones de un determinado dirigente político”.
En el documento se niega claramente que en Globovisión “esté previsto 'despedir' a una lista de profesionales del canal”, por lo que estos seguirán con “la misma libertad de la que han gozado en estos años. A ningún periodista de este canal se le ha dicho o exigido cómo hacer sus programas. A ninguno”. “En Venezuela cabemos todos y en Globovisión también cabemos todos”, concluye el comunicado.
“El canal sigue abierto a la libre expresión del diputado García. La gerencia de información goza de autonomía para cubrir y transmitir sus actividades, y los programas de opinión para invitarlo”, agrega el documento.
En segundo término, se explica que la salida del productor nacional independiente Francisco “Kico” Bautista fue “consecuencia de una preocupación expresada públicamente (por este) con relación al supuesto despido del diputado Ismael García, sin previamente haber buscado y solicitado la información sobre los hechos, como es el deber de todo periodista”.
“Adicionalmente, el señor Bautista se negó a recibir las llamadas telefónicas que se le hicieron para conversar sobre el asunto, y solo apareció el domingo en la noche, cuando ya estaba tomada la decisión por la junta directiva”, manifiesta el referido escrito.
Añade: “Ningún productor nacional independiente tiene derecho a ser consultado sobre las decisiones administrativas' tomadas por la directiva. Esta decisión no afectaba necesariamente la continuación del programa Buenas Noches, ni la relación laboral con los periodistas Carla Angola y Pedro Luis Flores”.
También expresa que la junta directiva “no ha vetado a funcionario o dirigente político alguno en la pantalla de Globovisión. Por el contrario, la política editorial del canal consiste en ampliar su línea de información y de opinión a todas las voces del país, sin discriminación alguna”, en clara alusión a la supuesta censura que se habría impuesto sobre el opositor Henrique Capriles Radonski.
“La cobertura de un determinado dirigente o partido político no puede estar determinada por lo que decida un grupo privado de interés. Ningún medio de comunicación social está obligado a transmitir en vivo, ni más o menos tiempo, las declaraciones de un determinado dirigente político”.
En el documento se niega claramente que en Globovisión “esté previsto 'despedir' a una lista de profesionales del canal”, por lo que estos seguirán con “la misma libertad de la que han gozado en estos años. A ningún periodista de este canal se le ha dicho o exigido cómo hacer sus programas. A ninguno”. “En Venezuela cabemos todos y en Globovisión también cabemos todos”, concluye el comunicado.
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