Al menos 16 establecimientos en 10 estados del país inyectan biopolímeros de manera ilegal a pacientes que solicitan procedimientos estéticos, denunció Mary Perdomo, vocera de la Fundación "No a los biopolímeros, sí a la vida".
El colectivo agrupa a más de 250 afectados por el uso de rellenos para
el aumento de glúteos, senos, piernas, abdominales y que es utilizado
además para quitar arrugas en el rostro.
Perdomo lleva una base de datos pormenorizada con denuncias y casos que llegan a la organización, con sede en Carabobo, entidad donde han contabilizado 10 centros o consultorios que operan clandestinamente. También manejan denuncias de dos establecimientos en Portuguesa, tres en Lara y una vivienda en Cojedes. En todos, aseguró, se ponen sustancias como biofill, biogel, ácido hialurónico, metacrilato y otros biopolímeros, aun cuando el Ministerio de Salud prohibió su uso con la resolución N° 152 de la Gaceta Oficial N° 40.065, publicada el 5 de diciembre de 2012.
"Hemos detectado centros que funcionan sin permisos sanitarios ni certificados de salud para trabajar. También tenemos denuncias de peluquerías donde almacenan inyectadoras con biopolímeros", afirmó, y extendió la lista a las entidades: Táchira, Falcón, Nueva Esparta, Monagas y Sucre. La fundación maneja direcciones y algunas fotografías de los sitios donde se practican esos procedimientos: estéticas, salones de belleza, centros comerciales, consultorios y clínicas.
"No a los biopolímeros, sí a la vida" se registró a principios de este año, aunque funciona desde 2012 como grupo de apoyo. Han constituido una red que brinda apoyo psicológico a los pacientes y se encarga de gestionar asesoría médica y legal para los afectados.
Encaletadas. En menos de un año han detectado consultorios y centros estéticos que fueron cerrados por Contraloría Sanitaria y continúan funcionando "bajo cuerda". La información proviene de una red de usuarios en el país, que visita centros estéticos, salones de belleza, consultorios y clínicas velando por el cumplimiento de la resolución y la colocación de carteles y avisos con la prohibición. "Hasta los avisos hemos tenido que proveerlos a funcionarios de la Contraloría Sanitaria en Carabobo", aseveró Perdomo, quien se queja del incumplimiento de la norma y la falta de fiscalización.
Cerrados. Lucero Velásquez, directora de Regulación y Control de Materiales, Equipos, Establecimientos de Salud y Profesionales de la Salud de la Contraloría Sanitaria, apunta que en 2013 se han inspeccionado 2.500 centros estéticos y clínicas en todo el país.
"Solo en el último trimestre se han clausurado 64 establecimientos y se han abierto 70 procedimientos administrativos por el uso de estas sustancias. La semana pasada, el Cicpc detuvo a dos personas por inyectar biopolímeros en una estética ubicada en Candelaria", refirió.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario