Basta y sobra que nos de hipo para que todas las personas a
nuestro alrededor comiencen a darnos infinitos tips para detener el
espasmo: “Mi abuelita dice que tomar agua con los ojos cerrados,
mientras masticas y brincas en un solo pie, quita el hipo rapidísimo”…
Entre tanto ajetreo: ¿a quién no se le quita el hipo?
En fin, pareciera que la única manera de quitarse el hipo es
haciendo el ridículo, pero no. Existen alternativas que científicamente
quitan el hipo por su efecto en el diafragma. Deja de seguir consejos
desesperados y aprende a detener el hipo con estos pasos.
Paso 1
Respira profundamente con el diafragma,
inhala lentamente hasta que no quepa más aire y exhala lentamente
también. Esto permitirá que se estire el diafragma y se detenga el
espasmo. Lo ideal es que contengas la respiración durante 30 segundos.
Paso 2
Comer una rodaja de limón te permitirá
detener el hipo. El ácido en las papilas gustativas hará que el
organismo se distraiga hasta el punto de proporcionarte el alivio de
quitarte el hipo. Por más ácido que sea, muerde sin piedad.
Paso 3
Llena el vaso con agua fría. Tomar
abundante agua helada permitirá que desaparezca la inflamación en el
diafragma que es responsable del hipo. Bebe todo un vaso lleno de agua
vigilando que no agarres aire, luego aguanta la respiración durante 30
segundos.
Paso 4
Otra alternativa para detener el hipo
es colocar tu boca en la pared externa del vaso. Ponte boca abajo y toma
tanta agua como puedas. Luego, reincorpórate. Esta alternativa
permitirá detener el hipo ya que la postura de tu cuerpo permitirá se
pause el espasmo del diafragma.
Paso 5
Respira dentro de una bolsa de papel.
Cubre tu boca y nariz. Inhala y exhala durante 2 ó 3 minutos. Esto
permitirá que se aumente el nivel de dióxido de carbono en la sangre y
se detenga el hipo.
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