Caracas. Con un balazo en la cabeza fue
localizado muerto, en la orilla del río San Pedro, Augusto Javier
Materano Villegas, de 40 años de edad, empleado del Metro Los Teques quien complementaba el presupuesto familiar conduciendo un taxi los fines de semana.
La versión ofrecida por José Benítez, cuñado de la víctima, refiere que Augusto trabajaba desde hace tres años en el Metro Los Teques. Residía en el barrio El Ciprés de la carretera vieja que conduce a la capital mirandina.
Condiciendo su Toyota verde solía trabajar como taxista los fines de semana. El domingo no fue distinto. A eso de las 3 de la tarde salió de casa con ese fin y también para cortarse el cabello. Su familia lo esperaba a las 9 pm como era habitual. Como no regresó, sus parientes lo buscaron en retenes policiales y en centros de emergencia. No tuvieron éxito, pero hallaron el taxi estacionado cerca de la casa. Le faltaba el caucho de repuesto y el reproductor. La búsqueda continuó entre vecinos hasta que el martes el cuerpo maniatado y amordazado fue detectado en el sector conocido como Minibruno, cerca del matadero, a orillas del río.
Cuando los forenses inspeccionaron el cadáver establecieron que Materano murió a consecuencia de un balazo que le impactó la cabeza.
Funcionarios de la policía científica adscritos a la Delegación de Los Teques están sumados a la pesquisa, con evidencias suficientes para apresar a los homicidas.
La versión ofrecida por José Benítez, cuñado de la víctima, refiere que Augusto trabajaba desde hace tres años en el Metro Los Teques. Residía en el barrio El Ciprés de la carretera vieja que conduce a la capital mirandina.
Condiciendo su Toyota verde solía trabajar como taxista los fines de semana. El domingo no fue distinto. A eso de las 3 de la tarde salió de casa con ese fin y también para cortarse el cabello. Su familia lo esperaba a las 9 pm como era habitual. Como no regresó, sus parientes lo buscaron en retenes policiales y en centros de emergencia. No tuvieron éxito, pero hallaron el taxi estacionado cerca de la casa. Le faltaba el caucho de repuesto y el reproductor. La búsqueda continuó entre vecinos hasta que el martes el cuerpo maniatado y amordazado fue detectado en el sector conocido como Minibruno, cerca del matadero, a orillas del río.
Cuando los forenses inspeccionaron el cadáver establecieron que Materano murió a consecuencia de un balazo que le impactó la cabeza.
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