Roswell Requena, comerciantes y pescador, explicó que durante la última jornada de flexibilización e incluso antes, podían salir dos o más viajes de autobuses con la respectiva autorización que implicaba la carta de residencia que solicitaban en las distintas alcabalas.
A pesar de que el municipio Costa de Oro no se encuentra entre los siete que permanecen con mayor vigilancia en Aragua según órdenes del Ejecutivo nacional, sus actividades siguen restringidas y una de ellas, son los viajes desde Cuyagua hasta Maracay, para que los pobladores realicen sus respectivas compras de artículos básicos.
Sin embargo, el reciente aumento de casos de COVID-19 también los afectó a ellos y, por ende, durante la semana no se registró ningún viaje y para este martes solo pudieron bajar algunas personas. Es una situación difícil para los pobladores, quienes optan por pescar o rebuscarse con intercambios de otras mercancías que tenían antes de que se presentará la contingencia.
Con respecto al comercio, solo se permiten a quienes cuenten con salvoconducto, como se había reiterado anteriormente. En la alcabala que se encuentra en El Limón que abre el paso para Ocumare se observó una mayor afluencia de vehículos que en la de El Castaño con dirección a Choroní.
En El Limón, algunos vehículos particulares bajaban sin ser revisados. Se observó como en la de Choroní, los funcionarios que se encontraban de guardia en el lugar devolvieron un automóvil que intentaba ingresar a la costa.
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