El ministro de Defensa de Colombia, Diego Molano, confirmó este lunes que un total de once personas fueron asesinadas en el municipio rural de Tumaco, fronterizo con Ecuador, en medio de los hechos de violencia ocurridos el pasado fin de semana en el departamento de Nariño.
Según el ministro, los primeros dos muertos fueron encontrados el sábado 20 de febrero, a la 1:00 de la tarde, en el corregimiento de Caunapi. Más tarde, se halló otro cadáver en la vereda Villa Rica.
Mientras, el domingo 21 de febrero, a las 5:00 de la mañana, se encontraron tres cuerpos en el corregimiento de Llorente. El mismo día, en horas de la tarde, el Ejército colombiano halló otros cinco muertos en la vereda Puerto Rico.
De acuerdo con Molano, los perpetradores de este último hecho criminal serían integrantes de la banda de narcotraficantes "Los Contadores", que sostuvieron una confrontación con un grupo disidente de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) "Oliver Sinisterra".
Aparentemente, los fallecidos corresponden a cinco integrantes de la disidencia Oliver Sinisterra, que eran conocidos con los alias Daniel, Liso, Checheno, Menor y Laiza. Asimismo, habría otros cuatro cuerpos desaparecidos, entre los que se encontraría alias "El Enano".
El ministro ofreció una recompensa de hasta 200 millones de dólares por información que conduzca a las capturas de El Gringo, líder de esta disidencia, y alías Mario 40, cabecilla de Los Contadores.
Molano agregó que en el área rural de Tumaco existen 9.796 hectáreas de cultivos ilícitos, con una potencial producción anual de 75 toneladas de cocaína.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) tipificó las muertes del fin de semana en Nariño como la masacre número 14, ocurrida en los primeros 53 días de 2021 en Colombia.
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