Un desfile de moda de la firma lusa Marques Almeida en el marco del certamen Portugal Fashion ha servido para inaugurar el puente de Arouca, el más grande colgante peatonal del mundo.
Con una longitud de 561 metros, esta espectacular obra, que lleva el nombre de 561 Arouca, es capaz de sostener a 30 personas al mismo tiempo. Situado a 175 metros de altura sobre el río Paiva, un afluente del Duero y no muy lejos de Oporto, tiene una envergadura de unos 480 metros.
El costo de la obra ha sido de 1,7 millones de euros y empezó a construirse en mayo del 2018. Está inspirado en los puentes mayas que atravesaban los valles montañosos de los Andes.
Cruzarlo tendrá un coste de 12 euros y aunque los turistas que sufran de vértigo posiblemente pasen un mal rato, está protegido por una estructura que impide las caídas al vacío.
El puente forma parte de una ruta llamada Passadiços do Paiva. Se trata de unas pasarelas que permiten recorrer ocho kilómetros de naturaleza salvaje, en la margen izquierda del río Paiva.
La ruta pasa por las playas fluviales de Areinho y Espiunca, donde se encuentra, entre las dos la Praia do Vau. El camino pasa sobre puentes colgantes y pequeños lagos de agua.
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