Monseñor Giacomo Cirulli decidió suspende al menos por tres años los bautizos en Italia, dijo que ese sacramento debe volver a tener el valor original. La medida fue aplaudida por varias personas y rechazada por otros en el mundo.
Cirulli es obispo de tres diócesis en Caserta al sur de ese país, donde la noticia causó impacto. Unos lo ven de manera positiva ya que la medida obedece también a reforzar ese sacramento. El cual aun se sigue cumpliendo en la religión católica.
«En el contexto socioeclesial actual, el oficio de padrinos y madrinas, en su mayor parte, ha perdido su valor original», destacó el obispo comentó el diario Leggo. Hasta ahora se espera por otras diócesis para ver si se suman a esta medida.
A partir del 20 de marzo en esta zona de Italia no se va a bautizar por el periodo antes mencionado. Indicó el obispo que la medida se debe para reforzar de nuevo la fe original.
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