Estas acciones ponen alerta a Estados Unidos (EEUU) y a Europa, quienes mantienen una guerra contra le gigante asiático en el contexto de imposición de sanciones para evitar que el país pueda continuar con la fabricación de estas herramientas.
De acuerdo con el portal Xinhua, pese a las sanciones, China cuenta con una economía sólida que permite la inversión a la industria de los semiconductores.
Lo interesante es que una parte de los miles de millones de dólares que está entregando a los fabricantes de chips no persigue contribuir al desarrollo de sus propios circuitos integrados de vanguardia; pretende catapultar la producción de chips fabricados con litografías de 28 nm o más antiguas.
Según expertos, los semiconductores son esenciales para el desarrollo científico, tecnológico y militar, pero los chips fabricados con tecnologías de integración superadas, como los de 28 nm, están por todas partes.
En los carros, los electrodomésticos, en los dispositivos que utilizamos cotidianamente, así como son esenciales en las infraestructuras críticas y los sistemas militares.
Sin su respaldo los circuitos integrados de vanguardia no pueden llevar a cabo su cometido, algo que tiene claro el gigante asiático y por lo que ha estado trabajando.
El portal de tecnología destaca que el gobierno de Xi Jinping ha entregado miles de millones de dólares a empresas como SMIC o Hua-Hong Semiconductor para poder desarrollar de forma efectiva los chips, pese a las sanciones.
“Los embargos de EEUU impiden a China producir chips avanzados, por lo que SMIC está duplicando la producción de circuitos integrados maduros y ha anunciado que construirá cuatro nuevas plantas que le permitirán multiplicar su capacidad de fabricación por tres”, señala el artículo.
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