Las autoridades indicaron que los hechos ocurrieron en las calles Lanús y Murucuyá, en la localidad de Morón. Ahí estaba situada la casa en la que vivía Daniel Roberto Gómez, de 65 años, con su esposa y su hijo.
Presuntamente, Gómez le recriminó a su esposa por no hacer unas compras para el hogar y la golpeó. Después, la mujer se fue a acostar a su habitación y el niño llegó a consolarla, a la vez que le aseguró que la protegería.
«Este no te golpea más», le dijo el niño a su madre y luego fue a buscar una pistola calibre 22 que estaba en la vivienda. Se acercó hasta su padre, quien estaba acostado en la sala, y le disparó un solo tiro en la cabeza.
La mujer escuchó el disparo y se acercó a socorrer a su esposo, mientras que llamaba a la policía. Una ambulancia llegó a la vivienda y trasladó al hombre hasta el Hospital Güemes de Haedo, en Morón, pero murió poco después.
Agentes de seguridad allanaron la vivienda y encontraron la pistola que el niño usó en el crimen. Durante el operativo, la mujer declaró que su esposo era muy violento y la había agredido en varias ocasiones, pero nunca lo denunció.
El niño fue detenido y quedó a la orden del Juzgado de Familia, puesto que es inimputable por su edad. Asimismo, la policía ordenó exámenes forenses para confirmar que él fue quien disparó y no su madre.
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