Un nuevo ataque de tiburón se registró este fin de semana en las playas de Carolina del Norte,
en la costa sureste de Estados Unidos, donde ya se cuentan hasta ocho
incidentes de este tipo, según informaron hoy medios locales.
Esta vez el ataque provocó heridas leves a un soldado del cuerpo de los Marines en Carolina del Norte.
El portavoz del Hospital Naval de Camp Lejune, Raymond Applewhite,
confirmó hoy que el soldado fue traído al centro médico el sábado pasado
en horas de la mañana tras ser mordido por un tiburón en Surf City,
ciudad localizada en la costa del estado.
El hombre de 32 años, cuya identidad no fue dada a conocer, fue tratado por heridas en el antebrazo y mano derecha pero dado de alta horas después.
El soldado es la octava persona que es atacada por un tiburón en las
costas de Carolina del Norte y el segundo incidente que se presenta en
Surf City desde el 11 de junio.
Los expertos en tiburones afirman que los recientes ataques en las costas de Carolina del Norte son el resultado de que hay “muchas personas en el agua”.
Asimismo, las inusuales altas temperaturas que se han mantenido en
los meses del verano ha obligado a los tiburones a emigrar al norte más
temprano de lo normal.
Los ataques de tiburones han batido récord en lo que va de 2015 en
Carolina del Norte, ya que en 2011 se presentaron 8 incidentes, en 2010
otros 5, y solo en los años 2008, 2000 y 1995 ocurrieron seis casos.
El pasado 1 de julio, Andrew Costello, de 68 años y de Massachusetts,
fue atacado por un tiburón en la isla Ocracoke, en la zona de los Outer
Banks, cuando nadaba frente a la estación del salvavidas.
El 24 junio y en el zona del Surf City, un niño de 8 años recibió
“heridas menores en un brazo y pies” por un tiburón, y el 28 de ese mes,
un joven de 17 años fue mordido por un tiburón en Rodanthe.
También el 27 de junio, un hombre de 47 años fue atacado a una milla
al norte del muelle de pesca Avon mientras nadaba en grupo, y una niña
fue mordida por un tiburón y su tabla de “boogie” fue destrozada por el
animal en Ocean Island Beach el 11 de junio.
Las lesiones más graves fueron sufridas por una niña de 12 años de
edad y un niño de 16 años de edad el pasado 14 de junio pasado en Cape
Hatteras, a una hora de diferencia. Ambos perdieron los brazos.
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