El cóndor (Vultur gryphus), es un ave rapaz y de
hábitos sedentarios que reside entre los 2.000 y 5.000 metros sobre el nivel
del mar (msnm), encontrándose a lo largo de la Cordillera de Los Andes y en
Venezuela, específicamente en los parques nacionales Sierra Nevada, Sierra de
la Culata y Sierra de Perijá.
Actualmente, en el país la especie se considera en peligro
crítico de extinción según el Libro Rojo de la Fauna Venezolana (2008). A nivel
internacional se encuentra incluido en el apéndice I de la Convención sobre el
Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres
(Cites).
Fácil de reconocer por su gran tamaño, el color negro de su
cuerpo y por el collar blanco alrededor del cuello, el ave pertenece al orden
de los Falconiformes y a la familia Cathartidae, cuyos miembros son
caracterizados por alimentarse exclusivamente de carroña. Con alas largas y
anchas, mide entre 102 y 127 cm y la envergadura de las alas puede llegar a 320
cm. El macho pesa unos 12.5 kg y la hembra unos 10 kg.
La misma, puede volar sobre unos 7.000 msnm y en condiciones
climáticas favorables mantener el vuelo durante cierto tiempo a unos 55 Km/h.
Una característica del animal es su monogamia, lo cual lleva
a cada pareja a poner un solo huevo que tarda en eclosionar entre 54 y 65 días.
La cría adquiere su independencia alrededor de los 18 meses y alcanza la
madurez sexual alrededor de los 8 años de edad.
Desde la llegada de los españoles sufrieron la amenaza de la
cacería, mientras que en tiempos recientes la especie se ha visto afectada por
la caza furtiva, la ingesta de plomo presente en la carroña y la de cebos
envenenados, colisiones contra tendidos eléctricos, escasez de alimento y la destrucción de su
hábitat.
En este sentido, en el año 2014 el Instituto Nacional de
Parques (Inparques), de la mano del Ministerio del Poder Popular para
Ecosocialismo y Aguas, impulsó la Red de Investigación y Seguimiento Ambiental,
enmarcado en el Órgano Superior de Parques y Monumentos Naturales de Venezuela,
para obtener un manejo más adecuado de estas áreas y la generación de grupos de
investigación de las legislaciones que rigen la protección de los parques de la
nación, para la preservación de la diversidad biológica que comprenden los
ecosistemas del país.
La tarea solo será posible con el esfuerzo de todos,
mediante una serie de reintroducciones de individuos criados en cautiverio por
los organismos competentes, así como proyectos de educación y concientización sobre
la especie.
El Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo y Aguas a
través de Inparques y su Plan de Acción 2013-2019, trabaja en beneficio de la
preservación y conservación de nuestra diversidad biológica, siguiendo los
lineamientos del Quinto Objetivo Histórico del Plan de la Patria 2013-2019: “Contribuir
con la preservación de la vida en el planeta y la salvación de la especie
humana”.
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