Nadie quiere morir, pero sin duda esta es una de las formas más tiernas
de despedirse de esta vida. Esta es la historia de Alexander y Jeanette
Toczko quienes se conocieron desde que tenía 8 años y desde entonces
nada los pudo separar hasta ahora.
Se casaron en 1940 y con el tiempo se hicieron inseparables hasta que
por los achaques de la edad Alexander sufrió una fractura de caderas que
lo dejó inmóvil. Su esposa se mantuvo a su lado para cuidarlo y amarlo
aunque ella misma también sufría. Así que ambos aceptaron la ayuda de un
centro para ancianos y se mudaron allí.
Su comunicación sin duda fue la clave del éxito de su matrimonio, pues
ya habían hablado de cómo querían partir. Ambos deseaban morir
abrazados. Su deseo se cumplió unos días después del aniversario de
bodas número 75. El primero en irse fue Alexander a lo que Jeanette le
susurro “Te amo. Espérame, estaré ahí pronto” . Así a las pocas horas
murió junto a su amado. Según las declaraciones de la enfermera que los
atendía su conexión era increíble.
Su hija en medio del dolor por la pérdida de sus amados padres, tuvo el
valor de tomar la foto de su último abrazo y compartir orgullosamente la
historia de su gran amor. Muchos creen que el amor es complicado. Esta
historia demuestra que se trata de aceptarse y comunicarse sinceramente.
Dale amor a tus seres queridos hoy y comparte esta bella historia.
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