Aunque es un conocimiento antiguo, hoy se sabe que no solo los pies
son una zona erógena por excelencia sino que existen personas con una
rara y placentera condición: el síndrome del pie orgásmico y como su nombre lo indica, se trata de un orgasmo que se origina en el pie.
Este síndrome llamó la atención de la ciencia en 2013, cuando una
mujer de 55 años que vive en los Países Bajos y se identifica como “la
señora A” fue a ver a un médico porque estaba teniendo cinco o seis
orgasmos espontáneos en un día, los cuales parecían proceder de su pie
izquierdo,
¡Placer extraño!
Después de tener esa sensaciones espontáneas, consultó a un médico.
Luego los expertos descubrieron que “la señora A” había sufrido una
infección grave unos años antes que le dejó hormigueo y una sensación de ardor en el pie izquierdo.
Los médicos llegaron a la conclusión de que los orgasmos de “la
señora A” estaban sucediendo por una sorprendente razón: los daños a los
nervios causado por la infección hicieron que su cerebro “no pudiera
distinguir qué información provenía de su pie izquierdo y cuál información provenía de sus genitales.
Como resultado, el cerebro decidía que la información sensorial del
pie izquierdo era idéntica a la información de la vagina; por lo tanto, el cerebro traducía la información del pie como un orgasmo”, escribió Marcel D. Waldinger en un sitio web acerca de su investigación.
Los médicos inyectaron anestesia en el nervio espinal que recibe la información sensorial del pie y los orgasmos se detuvieron.
Este es el primer caso famoso de orgasmos en el pie, pero ahora los
investigadores están buscando a otras personas que los padecen. Después
de todo, el nervio que recibe la información sensorial del pie y la
vagina entran en la médula espinal en el mismo nivel. Por lo tanto “la señora A” no puede ser la única.
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