Norkis Herrera Rodríguez, de 15 años, estaba feliz con su embarazo. Tenía siete meses de gestación y una relación medianamente estable. Sin embargo, su expareja no aguantaba el hecho de que estuviese embarazaba y constantemente la celaba, es por eso es uno de los principales sospechosos del asesinato.
El cadáver de la adolescente fue localizado la mañana del domingo en las aguas del río Guaire, a la altura de La California Sur. Su cuerpo presentaba múltiples puñaladas en el pecho y la cara.
Desde la morgue de Bello Monte su familia indicó que la última vez que supieron de ella fue el pasado sábado, cuando salió de la casa a verse con el papá de la hija que esperaba, y a comprar comida para recibir a su madre que llegaba de Colombia.
Los allegados a la víctima indicaron que no fue sino hasta el martes cuando se enteraron del crimen, gracias a las noticias publicadas en las redes sociales.
Ella estudió hasta cuarto año de bachillerato, pero no continuó por su embarazo, y actualmente se dedicaba a las labores del hogar.
Las averiguaciones del caso están a cargo del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), quienes intentan dar con el responsable del crimen.
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