El excapitán del portaviones estadounidense USS Theodore Roosevelt, Brett Crozier, quien fue removido de su cargo después de alertar sobre un brote de coronavirus a bordo de la nave, dio positivo en las pruebas de COVID-19, informó este domingo The New York Times citado a dos de sus compañeros de la Academia Naval.
Dos marinos cercanos a Crozier y su familia confirmaron que el excapitán dio positivo en los test para detectar la enfermedad y que comenzó a mostrar síntomas antes de abandonar el buque de guerra el pasado jueves, día en el que se anunció su despido. La Marina de EE.UU. de momento se ha abstenido de hacer comentarios sobre su estado de salud, reseña RT.
Crozier fue destituido de su cargo después de que se filtrara una carta en la que pedía a sus superiores de la Armada que tomaran acciones inmediatas para ayudar a su tripulación tras registrarse varios casos de COVID-19 en la nave. Solicitaba que se realizara un desembarco de emergencia de todos los marineros en la isla de Guam, en el Pacífico Occidental.
El secretario interino de la Armada de EEUU Thomas Modly, declaró que había perdido la confianza en la capacidad de Crozier para comandar la nave de manera efectiva en medio de la crisis. Explicó que la destitución se debió a que su carta fue enviada por "correo electrónico no seguro y no clasificado" a una "amplia gama de personas", en lugar de a la cadena de mando COVID-19.
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