Luego de ser sospechoso por supuestamente participar en el hurto de dos prótesis mamarias del cadáver de una mujer, un empleado del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf), se vio obligado a renunciar.
Yunis Karina Cardoso Moreno falleció por complicaciones respiratorias, después de una intervención quirúrgica. Sus restos llegaron a la morgue después de pasar por una cirugía de aumento de senos.
Luego de su muerte, el protocolo que sigue el personal forense es extraer las prótesis, cortarlas y luego colocarlas de nuevo. Con esto, indican fuentes del Senamecf, se evita que se comercialicen de nuevo en el mercado negro.
Según informaron, un asistente de apellido Rojas, se encargó de retirarlas y luego las refrigeró. Al llegar el cuerpo a la funeraria, los familiares se percataron que a Cardoso Moreno le faltaban sus prótesis mamarias.
Los deudos procedieron a reclamar a la dirección del despacho oficial. Sin embargo, Rojas no fue detenido por el hecho, pero se le exigió que presentara su renuncia.
El caso fue identificado con la nomenclatura k-21047700124.
Los familiares exigieron que las prótesis devueltas fuesen implantadas nuevamente en el cadáver de Cardoso Moreno. Este procedimiento se llevó a cabo en la funeraria.
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