Glenn Castellano, quien reveló a la Fiscalía los detalles del caso de secuestro, asesinato y desaparición del profesor y político Carlos Lanz del que participó directamente, tenía antecedentes penales e incluso purgó condenas en centros de reclusión del país, informó este miércoles el fiscal general, Tarek William Saab.
Específicamente, Castellano cumplió una pena de tres años en el penal de Puente Ayala (Anzoátegui) por robo de bancos y otros más en la cárcel de Tocorón (Aragua) por robo de vehículos.
Según el relato del fiscal, esta última estancia en prisión le permitió recurrir a un ‘pran’ líder negativo para contratar a dos sicarios que se encargaran de ultimar al líder revolucionario a cambio de 8.000 dólares estadounidenses, según el plan que habría urdidido tres meses antes Maxiorisol «Mayi» Cumare, esposa de Lanz y pareja de larga data de Castellano.
En una extensa rueda de prensa, Saab ofreció detalles del crimen, por el que ya fueron detenidas 13 personas, la mayoría pertenecientes al entorno íntimo de Cumare. Siete de ellas enfrentarán cargos por sicariato, asociación para delinquir y simulación de hecho punible, mientras que otras seis fueron imputadas por ocultar información clave a las autoridades.
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