El mejor equipamiento industrial para la producción de artes gráficas
La soberanía editorial del país se construye día día en 9 mil metros cuadrados, dotados de tecnología de punta, donde trabajadoras y trabajadores laboran enérgicamente. Con 200 personas en planta, este espacio representa la producción masiva de textos para la democratización del conocimiento.
Los libros son el resultado de las presentaciones de la Fundación El Perro y la Pana, Fundación Biblioteca Ayacucho, Monte Ávila Editores, la Casa Nacional de las Letras Andrés Bello y el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, estos a su vez, son difundidos mediante la Distribuidora Venezolana de la Cultura Fundación y la Fundación Librerías del Sur.
Según Solciré Pérez, coordinadora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la imprenta, los títulos que allí impresos han llegado para fortalecer la conciencia del pueblo, el Poder Popular, que ahora es Poder Cultural.
Dos máquinas rotativas que imprimen 35 mil periódicos, libros y revistas en una hora, forman parte de un sistema de producción completo en el que se pueden encuadernar hasta 8 mil obras en sesenta minutos cada uno de ellos de hasta 700 páginas.
Equipo revolucionario
Dagoberto Ballesteros, lleva 3 años laborando de la Imprenta de la Cultura, su trabajo consiste en mantener en orden la infraestructura y velar por el buen funcionamiento de las instalaciones. “El estar aquí significa todo, una oportunidad para aprender y enseñarle a los demás todo lo que a diario se aprende en un lugar tan importante como éste”, dijo.
Por su parte, Ingrid Herrera, ha recibido al igual que los demás trabajadores una formación amplia que le ha permitido desempeñarse en varias áreas de la empresa. Aseveró que como mujer y profesional se siente realizada por el crecimiento enorme.
“Cuando sale a la calle y ve a las personas leyendo un periódico, un libro o revista siempre les digo que valoren lo que tienen en sus manos, pues detrás de ellos se esconde un proceso muy interesante y sobretodo de calidad”, señaló.
Jonathan Higuera, se encarga de hacer acompañamiento durante las visitas guiadas explicando cómo funciona la maquinaria y además se complementa el proceso de producción con el talento humano para hacer posible la publicación de miles y miles de títulos, “en este trabajo el secreto es la pasión”, sostuvo.
Para Rafael Castellanos, otro miembro de la gran familia de la imprenta, este es un logro muy importante y “me siento orgulloso de pertenecer a esta empresa que ha dado tanto al país. Los venezolanos nos nutrimos ahora que tenemos más acceso a la lectura como motor de desarrollo, nunca antes había visto tantos títulos al servicio de las personas, con precios económicos y en ocasiones gratuitos, esta imprenta es de todos los venezolanos”, aseguró Castellanos
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