La Universidad de Sevilla (US) realizó un estudio para
descifrar el impacto que tiene en las personas el uso excesivo del celular y la
conexión a la pantalla, llegando a la conclusión que esto empeora la
condición física, crea hábitos sedentarios y afecta al estado anímico de las
personas, entre otras cosas.
Aquellos estudiantes a los que se les realizó el experimento
y presentaban «menores niveles de actividad física usaban casi tres veces más
su teléfono móvil que el resto. Por su parte, aquellos que reportaban tener una
peor calidad del sueño también usaban más estos dispositivos», concluye el
análisis de la US.
El otro aspecto que se destaca en el estudio es que «un
excesivo uso de dispositivos de pantalla (de 3 a 4 horas al día) se asocia con
un incremento del riesgo de mortalidad», según lo expresado por el profesor de
la US Borja Sañudo.
Cabe acotar, que muchos de los efectos por la adicción a los
dispositivos de pantalla no son inmediatos, pero sí se evidencian en las horas
de sueño y sobre todo, en la irritabilidad, los estados de ánimo cambiantes y
las tendencias a la depresión que experimentan quienes son adictos a estos
equipos.
Por otra parte, otros estudios alertan de las conexiones cerebrales que implica la adicción a las pantallas y que generan reacciones en el cerebro que son similares a las que provocan los opiáceos y son, por lo tanto, tendentes a la soledad, al aislamiento y a la depresión.
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