Karen Julieth Cárdenas Uribe ingresó a una sala de operaciones en Bucaramanga, Colombia, para realizarse una rinoplastia, pero horas después falleció.
Según el hermano de la víctima, Karen Julieth Cárdenas ingresó a la sala de operaciones a las 5:00 a.m. y luego de dos horas, 7:00 a.m., se inició su intervención quirúrgica.
Tras seis horas y media, a la 1:30 p.m. permaneció en las instalaciones donde se llevaba a cabo el procedimiento.
A pesar del tiempo, lo que realmente les causa incertidumbre a la familia de la víctima, es que la dieron de alta minutos después, según ellos, de la operación.
Finalmente, a las 2:00 p.m. estaba Cárdenas en su casa, donde se habría desmayado.
Desesperado y preocupados, familiares de Karen Julieth Cárdenas llamaron al médico que operó a la joven.
Al lograr comunicarse con el especialista, él les aconsejó que la trasladaran rápidamente a la misma clínica en dónde le practicaron la operación, en el municipio colombiano de Floridablanca.
Los padres decidieron llevarla hasta la Clínica Los Comuneros, pues era el centro médico más cercano al barrio San Francisco.
Allí trataron de reanimarla y en ese proceso, a Karen Julieth Cárdenas le dieron seis paros cardiorrespiratorios hasta que finalmente murió.
Se sabe que la familia ya ha iniciado una denuncia en la Fiscalía, primero, para establecer realmente la causa de la muerte y que los responsables del fallecimiento paguen por su muerte.
La familia sostiene que la joven no padecía ninguna dificultad en su salud y que la muerte de ella se debe a una negligencia médica.
Su hermano, por otro lado, también cuestiona el hecho de haberle permitido a la paciente salir minutos después de la operación.
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