La niña y el niño son fenómenos que comienzan cuando las aguas superficiales del Pacífico Ecuatorial se vuelven más calientes o frías.
Estos fenómenos ambientales pueden provocar inundaciones, sequías, incendios forestales y huracanes o tifones, entre otros fenómenos extremos en varias partes del mundo.
La Niña produce un enfriamiento a gran escala de la temperatura de la superficie del océano; demás, genera aumento de los vientos, la presión y las precipitaciones. Por su parte, El Niño incrementa la temperatura y disminuye las lluvias.
¿Cómo se forman el fenómeno de La Niña y El Niño?
El Niño es un fenómeno atmosférico causado por el calentamiento gradual del océano Pacífico que provoca intensas precipitaciones. Mientras que, El fenómeno de la Niña se desarrolla cuando la fase positiva de la Oscilación del Sur, alcanza niveles significativos y se prolonga por varios meses, teniendo un debilitamiento de la corriente contra-ecuatorial, es decir, que las aguas cálidas provenientes de las costas asiáticas, afecten poco las aguas del pacifico de América.
¿En qué se diferencian El Niño y La Niña?
El Niño es la fase cálida de un evento climatológico y La Niña, su fase fría. Son fases opuestas de un complejo patrón meteorológico tan poderoso que puede alterar la temperatura global y causar efectos atmosféricos extremos en todo el planeta.
El Niño suele darse más frecuentemente que La Niña y ambos pueden durar la mayor parte del año, o incluso más. Según su intensidad, los cambios en la circulación atmosférica pueden afectar el clima en diferentes partes del mundo.
Estos fenómenos climatológicos son originados en el océano Pacífico, cerca del Ecuador, El Niño y La Niña se forman por un patrón llamado El Niño-Oscilación del Sur, o ENOS. El Niño suele darse más frecuentemente que La Niña y ambos pueden durar la mayor parte del año, o incluso más. Sin embargo, nunca pueden ocurrir al mismo tiempo.
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