El domingo en la noche concluyó la audiencia de presentación contra los dos directivos.
Cipriano Jiménez, quien fungía como director del Internado Judicial de San Felipe, y Aldo Alejos, encargado del penal, quedaron privados de libertad, luego de la toma del recinto por la Operación Gran Cacique Indio Guaicaipuro.
A ambos les imputaron el delito de retraso u omisión intencional de funciones agravadas. Deberán permanecer tras las rejas en la División de Investigación Penal (DIP) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en San Felipe.
Está previsto que permanezca en el sitio al menos 45 días, tiempo en el que deberían fijar fecha para la audiencia preliminar. En el lapso estipulado, la fiscalía encargada del caso colectará las evidencias necesarias en contra de los investigados.
Los hombres fueron detenidos el pasado viernes durante la intervención al Internado Judicial, esto luego que la comisión que integra la Operación Gran Cacique Indio Guaicaipuro consideró que ambos estaban implicados en presuntos hechos irregulares.
Desde entonces fueron trasladados bajo custodia policial a la DIP, donde los reseñaron y pusieron a orden de la fiscalía del Ministerio Público de Yaracuy.
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