La distribución se
mantiene para las estaciones donde surten a los chóferes de transporte público.
El padecer para
conseguir gasoil se mantiene vigente en la entidad. Lo que llega es distribuido
para sectores prioritarios, en este caso para las líneas de transporte público,
para el resto se ha convertido en una odisea, de hecho para los productores se está
tornando difícil también.
El propietario de una estación
de servicio explico que el combustible llega a diario a ciertas bombas, así
como en otras de manera intermitente, mientras que a otras no llega nada.
“La distribución no es
del 100 por ciento en el estado, porque de ser así llegaría a todas las que
expenden gasoil y no es así, hay una falla enorme en la distribución, de hecho
a mi no me llega desde la semana pasada, y lo que llega al estado es una sola
gandola”, explico.
Indicó que los
principales afectados son los transportistas, los productores y el usuario común
que lo necesita para su trabajo en el campo, las plantas eléctricas y movilizar
las maquinas, entre otros.
Explico que una gandola
tiene tres compartimientos, dos de 13 mil litros que son distribuidos en las
estaciones de servicio priorizadas como Las Delicias y Jaime II, donde atienden
al grueso del transporte público, y el otro de 9 mil litros, que lo rotan entre
el resto de las bombas como Cocorotico, La Catalana, El Naranjal, El Peñón y
HF, entre otras.
Mientras hay esa rotación
entre el resto de las bombas que están ubicadas en el casco metropolitano, es
que se siente la poca distribución que llega del combustible.
“No es solo el gasoil,
la gasolina también está fallando en la distribución”, dijo.
La propietaria de un
restaurante ubicado en las adyacencias de una estación de servicio en Chivacoa
comento que los gandoleros pernoctan hasta tres días a la espera del gasoil, y
que en las últimas semanas es poca la venta en su negocio debido a que la circulación
de carga pesada ha disminuido.
Un transportista indico
que muchas veces los pasajeros quieren pagar menos de lo que cuesta un pasaje,
pero no saben lo que significa estar en una cola casi la mañana completa.
“Si llega a Jaime todos
los días, pero hay que calarse la cola, tampoco es que es fácil, porque si
abrieran mas para el sector publico las colas fueran menos largas, pero no
queda de otra que aguantar para poder trabajar, por eso no podemos estar
cobrando lo estipulado por el pasaje porque tenemos bastante tiempo con esa
tarifa y todos los repuestos suben semanalmente”, apunto.
Sobre el sector
productivo se conoció que no les distribuyen desde la semana pasada, solo se le
prestó apoyo a la Asociación de ganaderos de Aroa.
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