No hay forma. Los kilitos que te dejaron de regalo las vacaciones de verano siguen ahí, pero especialmente te sientes hinchada y la celulitis en abdomen y cartucheras se ha hecho más evidente. ¿Qué puedes hacer?
La retención de líquidos es un problema al que un gran número de mujeres se enfrenta, y es que está relacionado con las hormonas (exceso de estrógenos), además con la herencia genética y los hábitos de vida (estrés, comida rápida y exceso de sal).
Desde Barcelona, la nutricionista Nuria Escoda ofrece unas recomendaciones cuando se engorda por la tendencia retener líquidos: “para ayudar a que el cuerpo elimine el líquido conviene tomar alimentos ricos en potasio y que sean diuréticos,
como alcachofas, apio, coliflor, endibias, ajo, cebolla, piña, melón,
sandía, pera, manzana y melocotón. No hay que superar tres piezas al
día”.
Además, Nuria nos da las pautas del plan: “Frutos secos crudos (4 o 5 nueces al día) y legumbres, con moderación. Con retención de líquidos, conviene reducir la sal en las comidas,
usar medias especiales de compresión y es mejor no tomar medicamentos
diuréticos, ya que no solucionan el problema de manera eficaz (hay que
consultar al médico)”.
Por otra parte, las dietas hiperproteicas o bajas en hidratos de carbono
que tan de moda se han puesto en los últimos tiempos no son para nada
aconsejables, ya que este tipo de regímenes sobrecargan el hígado y el
riñón, además de no fomentar buenos hábitos dietéticos. Por supuesto, olvídate de las denominadas “dietas milagro”,
ya que la pérdida de volumen en este tipo de dietas no está relacionada
con la pérdida de grasa, sino con la de agua y músculo, por lo que
finalmente se producirá el efecto rebote, ganando los mismos kilos con la misma rapidez o incluso mayor con la que se habían perdido.
Dieta contra la retención de líquidos
• Desayuno: yogur de soja, una pera, tres nueces. Una taza de café o de té verde.
• Media mañana: mini bocadillo de pavo o de jamón ibérico con una taza de té verde o café.
• Comida: 200 gramos de verdura hervida (alcachofas, apio, espárragos, berenjenas, endibias, coliflor) o ensalada; y 150 gramos de pescado, conejo o pollo, siempre a la plancha.
• Media tarde: infusión depurativa como la de ortosifón o cola de caballo; dos rodajas de piña natural o zumo de pomelo. No superar tres frutas diarias.
• Cena: 150 gramos de verdura o ensalada (igual que en la comida); y 150 gramos de pescado o tortilla (de dos claras y una yema). No superar los cuatro huevos a la semana.
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