Si eres de las que siempre está buscando nuevas técnicas para la masturbación masculina y complacer a tu pareja, debes conocer estos trucos que lo harán llegar al mayor orgasmo de su vida.
Para dominar la masturbación masculina debes recordar que el pene de tu pareja no es un simple trozo de carne, pues es mucho más. De hecho, tiene las mismas terminaciones nerviosas que puede tener el clítoris (muchas menos, pero claro que están). Así que lo ideal es que comiences a jugar con él con la misma delicadeza y suavidad con la que te acaricias tú.
Hay ciertas partes del pene que necesitas considerar, como el glande (la punta), el frenillo (el hilo que une el glande con el prepucio), y la piel (que se mueve de arriba y abajo para proteger el glande), y finalmente el tronco.
Ya que hemos aclarado el tema de las partes del pene pasemos a las técnicas que te harán una diosa de la masturbación masculina:
- Con la mano húmeda, agarra el glande como si fuese la palanca de cambios de un carro, y empieza a hacer círculos sobre él. Juega con la presión de tu mano, abre y cierra en función de lo blanco que vaya poniendo los ojos tu pareja (claramente por el placer que siente). Si es capaz de aguantar más de cinco minutos, invítale un trago después, seguro lo necesitará.
- Haz un túnel entre tus dos manos como si fuera una vagina y juega con ellas de arriba hacia abajo. Esta técnica es muy similar a la tradicional para jugar con el prepucio, pero en una versión 4.0.
- "Parar en nombre del amor": Consiste en la intensidad de la masturbación. Juega con el pene desde que esté flácido hasta su máxima erección. El secreto es que vayas aumentando la velocidad de forma paulatina y cuando hayas llegado al máximo de tu rapidez, pares en seco.
- Luz al final del túnel: En esta variante de la masturbación masculina, debes utilizar tus manos como una especie de conducto por el que el pene se va deslizando. ¿Cuál es la diferencia a la anterior?, pues que cuando terminen de salir tus manos, y empiece a sobresalir el glande, debe estar tu boca con la lengua esperando, lame y haz que el pene vuelva al túnel. El cambio de temperatura, textura y humedad le hará disfrutar al máximo.
- Con lubricante en tus manos, sube por el tronco con la palma de la mano mirando hacia ti. Una vez que llegues al glande, gira la mano y deja que la palma apunte hacia el otro lado. Luego baja de nuevo por el tronco al revés. Si logras descubrir el ritmo y aumentar la velocidad, será increíble para él.
- En esta técnica, pon a tu hombre frente a un espejo, y luego tú ponte detrás sin que él te vea, y agarra su miembro como si lo hiciera él mismo. Primero muy flojito, y luego aumenta la presión. Verse en el espejo mientras su pene se va poniendo erecto lo pondrá a mil.
Durante la masturbación masculina debes tener cuidado con:
1- EL GLANDE:
Es una parte extremadamente sensible. Por ello, no deberías tocarlo con las manos secas. Humedece tus manos con lubricantes o aceites esenciales de masaje y luego comienza a acariciarlo suavemente. Este puede ser uno de los mayores placeres para él.
2- EL FRENILLO:
Mientras juegas con el frenillo, debes recordar que a más tensión, más placer para él. Una buena técnica es que te mojes el dedo pulgar e índice y acaricies su frenillo con movimientos circulares, con el miembro en todo su esplendor.
3- EL PREPUCIO Y EL TRONCO:
A los hombres les encanta que les agarres el tronco de su pene y muevas desde arriba, hasta abajo el prepucio. Sin embargo, debes tener cuidado de ponerte muy creativa, porque aunque lo veas duro como una piedra, no debes hacer movimientos bruscos de un lado a otro ¡Eso les duele!.
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Mamarmelo
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