Varios estudios estadounidenses, dieron a conocer este lunes que los cigarros electrónicos pueden causar daños cardiovasculares en la salud.
Estos análisis se presentarán en las próximas sesiones científicas de la Asociación Americana del Corazón.
Este evento se celebrará en la ciudad de Chicago, Estados Unidos, del 5 al 7 de noviembre.
Varios investigadores de la Universidad de Wisconsin, compararon datos con tres grupos de consumidores de cigarrillos.
Se dividen los consumidores de cigarrillos electrónicos, los fumadores de cigarros tradicionales y quienes no utilizan ningún producto de nicotina.
Las nuevas conclusiones se suman «al creciente conjunto de datos científicos» que muestran lesiones cardiovasculares.
Según el estudio, los consumidores de cigarros electrónicos, presentan «cambios preocupantes» en la función del corazón y los vasos sanguíneos.
Además, muestran que este riesgo se observa incluso entre personas más jóvenes que tienen un historial más corto de consumo de nicotina.
Consumidores de cigarros fueron evaluados
En ambos análisis participaron 164 personas que declararon usar exclusivamente cigarrillos electrónicos durante una media de 4,1 años.
Otras 117 personas que dijeron fumar exclusivamente cigarrillos tradicionales durante una media de 23 años.
Y por último, 114 personas que nunca habían ni fumado ni vapeado.
En el primero se evaluó la presión arterial, la frecuencia cardíaca o el diámetro de la arteria braquial en el brazo.
En comparación con las personas que no consumían nada de nicotina, aquellas que vapeaban o fumaban cigarrillos eléctricos tenían mayores aumentos de la frecuencia cardíaca.
Además, registraron mayores incrementos de la presión arterial sistólica y diastólica, y mayor constricción de la arteria braquial.
En el segundo análisis se evaluó el rendimiento de los voluntarios en una prueba de esfuerzo y se observaron cuatro parámetros: equivalentes metabólicos, la carga de trabajo del corazón en los niveles de máximo ejercicio, la diferencia entre la frecuencia cardíaca máxima estimada y la de reposo, y la recuperación de la frecuencia en 60 segundos.
Los consumidores de cigarros eléctrónicos tuvieron un desempeño significativamente peor en las cuatro medidas, en comparación con quienes no consumen consumo nicotina.
El tercer estudio, liderado por la Universidad de Boston, se centró en los cigarrillos electrónicos con sistemas «saborizados», muy populares entre jóvenes.
Concluye que su uso puede conducir a la exposición de compuestos orgánicos volátiles, los cuales pueden afectar negativamente a la salud cardiovascular.
Incluso, esta afectación también la padecen de manera similar los consumidores de cigarros tradicionales.
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