A Magaly Quevedo, una mujer de 60 años, la asesinó su sobrino y el cuerpo fue localizado la mañana de este martes 22-S en su apartamento en San Francisco.
El hallazgo del cadáver dejó a todos sin palabras: sobre la sábana que cubría el cuerpo dejó una Biblia. Encima de las páginas, de acuerdo con las imágenes que circulan, se ve que colocaron, además, un angelito o niño, hecho en yeso.
El crimen se registró en uno de los bloques del populoso sector de San Felipe, de la urbanización sureña.
Funcionarios de la PNB fueron de los primeros en llegar al sitio y según el reporte policial, «el implicado en este homicidio, fue su sobrino, quien luego de quitarle a puñaladas la vida a su tía, huyó del apartamento».
En horas de la tarde de este martes, se conoció que oficiales de la PNB y funcionarios del Eje Homicidio del Cicpc, adscritos a La Cañada de Urdaneta, detuvieron al implicado en el barrio Luis Aparicio.
Lo identificaron como Estiver Quevedo. Extraoficialmente se dijo que le encontraron un arma blanca y varias pertenencias que eran de su tía Magaly
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