El gerente del Sistema Teleférico Warairarepano, Víctor Cruz, dio la apertura a esta programación con la primera bajada de la Virgen de la Chiquinquirá en la cabina de un funicular.
Relató que esta actividad fue comandada por puras mujeres, quienes se encargaron de afinar los mínimos detalles de la producción, además asumieron el compromiso de hacer esto una tradición del sistema.
Para la bajada adecuaron una cabina convencional con flores y plantas autóctonas del Waraira, como el ave del paraíso, ortencias, rosas, girasoles y pino como follaje. “Ese trabajo lo hicieron con mucho cariño la señora Maira, Lisbeth, entre muchas otras”, destacó.
La escultura de 1,64 metros abordó el funicular desde la estación parque nacional Waraira para descender una altura de 2.150 metros, en un periodo de unos 15 minutos.
Al llegar a la estación de destino Maripérez, la imagen fue recibida por el monseñor Francisco Térán con una ofrenda religiosa y gaitas navideñas.
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