Entre ellos se respira amor, y también 
unos cuantos años. Su fuerza como pareja combate todos los vendavales en
 sus primeros meses de vida, si bien un par de años sirven para reduirla
 a cenizas llevándose la relación con ella. Hace unos 
años, este tipo de relaciones se multiplicaron. Pero ahora que ya no 
queda ni rastro de muchas de ellas, no podemos evitar preguntarnos: 
¿cuánto afecta la diferencia de edad en la pareja?
Tras los rumores que unían a Jennifer Lawrence (22) y a Bradley Cooper (38) por la película “El lado bueno de las cosas“,
 el actor tuvo que comunicar públicamente que no existía ninguna 
relación sentimental entre ambos. De hecho, además de negar el affaire, 
no pudo evitar decir: “podría ser su padre“.
Un comentario que, si bien podría ser 
verdad, no ha impedido otras parejas en la misma situación. Hablamos, 
por ejemplo, de la relación efímera que mantuvieron Heidi Klum (39) y 
Flavio Briatore (62), o de la que actualmente tiene el empresario 
italiano con la modelo de lencería Elisabetta Gregoraci (28).
Pero ellos no son -ni mucho menos- los 
únicos ejemplos de relaciones “a distancia”. Les siguen Carlota 
Casiraghi (26) y Gad Elmaleh (41), Mary-Kate Olsen (26) y Olivier 
Sarkozy (43), y Aaron Taylor-Johnson (22) y Sam Taylor-Wood (45), entre 
muchos otros. Está claro que este tipo de relaciones siguen naciendo (y 
lo seguirán haciendo), pero lo que en redacción de verdad nos importa es
 cómo afecta dicha diferencia de edad en la relación.
Es obvio que el amor y la ilusión pueden
 no sólo originar el  noviazgo, sino hacerlo crecer y alimentarlo 
durante una época. ¿Pero es  capaz también de mantenerlo con vida a lo 
largo de tiempo? Las diferentes etapas que conllevan los años difícilmente pueden ser obviados a base de besos y cariño.
La  necesidad (por general) del 
individuo mayor de emprender ciertos  proyectos personales (casarse, 
tener hijos, la convivencia, vivir en  otros países, etc.) no siempre puede cuajar
 en la otra  persona, si bien ésta acepte el reto en un principio. Es 
por eso que  estas relaciones requieren un alto flujo de confianza, comunicación y compromiso, ya que sin ellos la relación no presenta un buen plan de futuro.
Hasta cuando la relación parecía 
demostrar una buena conexión entre  sus protagonistas (véase caso Ashton
 Kutcher respecto a Demi Moore),  parece que la diferencia de edad no ayuda
 a resolver  los problemas. Es por eso que, si bien no creemos que la 
diferencia de  edad pueda ser siempre motivo de ruptura, desde luego 
pensamos que lo  que implica no contribuye a una relación duradera.
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